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Vivienda en el exterior
Prodesa calcula que la compra de vivienda por parte de colombianos migrantes aumentaría 45% en 2025, lo que muestra interés en tener patrimonio fuera de su residencia
La compra de vivienda por parte de colombianos que residen en el exterior se ha convertido en tendencia como una forma de construir patrimonio a pesar de haber migrado, es por ello que, en el primer semestre de este año, esta población adquirió más de 5.500 unidades de vivienda nueva, lo que representa entre 6% y 7% de las ventas nacionales totales, de acuerdo con Viventa y Camacol.
El valor promedio de la vivienda se ubicó en $320 millones en los primeros seis meses del año, lo que implica un crecimiento de 6% frente a 2024. Por tipología, 58% de las compras son viviendas No VIS, principalmente de gama media y alta, y 42% son viviendas VIS. Andy Altena, CEO de Viventa, señala que una razón que implica esta dinámica de compra es que por las mismas sumas de dinero no es posible a acceder a una casa propia en países como Estados Unidos.
Otros factores que la empresa explica sobre el impulso de la compra es una tasa de cambio favorable y el acceso a crédito hipotecario desde el exterior. “Estamos viendo un comprador más activo, que combina motivaciones emocionales, como el arraigo familiar, con razones de inversión a mediano y largo plazo. El segmento migrante está aportando dinamismo a las ventas nacionales y generando ingresos de divisas para el país”, dijo Sandra Amezquita, presidenta del Consejo de Administración de Viventa.

Con miras a 2026, estiman que la dinámica se siga impulsando por: estabilidad macroeconómica, la mejora en las condiciones de financiación y la expansión de soluciones digitales que facilitan la compra desde el extranjero.
“Este es un segmento estratégico, más de cinco millones de colombianos viven fuera del país, y cada año más de 100.000 manifiestan interés en invertir en vivienda en Colombia. Nuestra tarea es ofrecer procesos seguros, ágiles y confiables que respondan a su realidad y a sus expectativas”, agregó Altena.
Desde el sector de la construcción, Prodesa destacó cómo ha crecido el segmento en el grueso de sus ventas, de forma que tienen proyectado que este nicho representará 17% de las ventas al cerrar el año.
Pablo Osorio, gerente comercial de la constructora, comentó que, “las compras de vivienda de colombianos migrantes es un mercado en crecimiento. En el 2024 vendimos $103.000 millones lo que representó 15% de las ventas. Y para 2025 estamos proyectando vender $150.000 millones, 45% más respecto del año pasado”.
En el caso de esta empresa, las ciudades en las que más se está comprando desde otros países son: Bogotá, Barranquilla, Cartagena, Cali e Ibagué. Y por el otro lado, los países desde donde proviene la inversión, de acuerdo con el registro de Viventa, son: Estados Unidos (51,1%), España (16 %), Chile (3,9%), Reino Unido (3,9%) y Canadá (2,3%).
Si se revisa el perfil de los compradores, se encuentra que en su mayoría so n mujeres, con 54% del total, frente a 46% de hombres. Tienen entre 26 y 46 años, y en 95% de los casos tienen empleo formal y la decisión de compra la toman en los primeros cinco años tras de migrar. En 62% es con motivo de inversión, mientras que 26% lo compra para uso personal.
Viventa destaca que el acceso a crédito desde el exterior es la forma en la que se financia 92% de las operaciones; y con la digitalización no hay necesidad de viajar al país para comprar. Y Prodesa señaló que actualmente, los bancos domicilidos en Colombia prestan hasta 80% del valor de la vivienda a colombianos no residentes a través de intermediarios autorizados por los bancos. Por lo que teniendo estas áreas solucionadas, hacer este tipo de inversiones ahora es mucho más sencillo y lo que se debe agregar es hacer una declaración ante el Banco de La República.
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De acuerdo con datos de la Superintendencia Financiera, con corte al 1 de octubre, estos bancos cuentan con tasas de 12,55% y 12,68%