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Los manifestantes se reunieron en la Plaza de la República, en el corazón de Ereván.
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Muchos de los presentes en la plaza evocaron el recuerdo del genocidio armenio de 1915, en referencia a las masacres de armenios bajo el Imperio Otomano
Miles de manifestantes se reunieron en la capital armenia el miércoles para denunciar la percepción del fracaso del Gobierno armenio en apoyar a los separatistas armenios en Karabj, después de que Azerbaiyán obligara a la región separatista a una rendición humillante .
Los manifestantes se reunieron en la Plaza de la República, en el corazón de Ereván. Muchos exigieron la renuncia del primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, quien presidió la derrota ante Azerbaiyán en una guerra de 2020 y ahora el colapso final de las autoridades armenias de Karabaj.
Harut, un ingeniero solar de 32 años, dijo: "Esperamos que se vaya. Es mejor para un líder que perdió la guerra irse que quedarse y continuar". Explicó que la derrota fue aún más dolorosa dado el tiempo que los armenios habían luchado por Karabaj. "Es algo por lo que hemos estado luchando durante 30 años, durante más de 30 años y ahora todo fue en vano".
Los políticos de la oposición pronunciaron discursos desde un escenario denunciando a Pashinyan, quien tomó el poder en una revolución de 2018 durante la cual habló en mítines en la misma plaza.
Algunos de los que estaban en la Plaza de la República gritaron "¡Artsakh!", otros "¡Nikol es un traidor!".
Muchos de los asistentes ondearon banderas de Nagorno-Karabaj y algunos se pelearon con la policía. Otros arrojaron botellas y piedras contra la oficina del primer ministro en la Plaza de la República.
La policía antidisturbios acordonó las oficinas gubernamentales, mientras camiones de estilo militar estaban estacionados cerca de la plaza en medio de una fuerte presencia de las fuerzas de seguridad.
Azerbaiyán dijo el miércoles que había detenido su ofensiva después de que las fuerzas separatistas armenias en Nagorno-Karabaj acordaron un alto el fuego, cuyos términos indicaban que el área volvería al control de Bakú.
"Necesitamos que Armenia se una a Artsaj y luche", afirmó Samvel Sargsyan, de 21 años, estudiante de la Universidad de Teatro y Cine de Ereván, nacido en la capital de Karabaj, conocida por los armenios como Stepanakert y por los azeríes como Khankendi.
"Los armenios no pueden aceptar otro país, otra religión. ¿Por qué deberíamos hacerlo nosotros? ¿Por qué debería Armenia dar una parte de sí misma a otra nación?"
Sargsyan, que sostenía la bandera roja, azul y naranja de Artsaj, añadió: "Si perdemos Artsaj, perdemos Armenia. Porque el próximo paso será Armenia".
Otro manifestante, Khachatur Kobelyan, dijo que estaba "realmente conmocionado por la agresión de Azerbaiyán a Nagorno-Karabaj". "Creo que la ONU, Estados Unidos y Rusia son los actores que podrían hacer algo, pero estoy realmente muy decepcionado y no veo ninguna esperanza relacionada con esta solución".
Pashinyan ha acusado públicamente a Rusia en los últimos meses de no hacer lo suficiente para apoyar a Armenia. Dijo el martes que fuerzas no identificadas estaban hablando de un golpe de estado en Ereván.
Azerbaiyán dijo que quería un "proceso de reintegración fluido" para los armenios de Karabaj y rechazó las acusaciones armenias de que quería "limpiar étnicamente" la región.
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