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El presidente de Porvenir teme que la inclusión de este punto en el Plan Nacional de Desarrollo deteriore la calidad del empleo en el país y que la mayoría de la contratación sea así
De acuerdo con datos de 2018, de las 25 millones de personas económicamente activas, 21 millones están afiliadas a un régimen de pensión. Sin embargo, de estas, solamente 8,2 millones cotizan al menos una vez al año y 2,4 millones cotizan los 12 meses. Esto significa que solo 10% de la población económicamente activa cotiza formalmente para su jubilación.
Considerando que 45% de la población trabajadora en Colombia gana menos de un salario mínimo, Miguel Largacha, presidente de Porvenir, se refirió al Piso Mínimo pensional que se incluyó en el Plan Nacional de Desarrollo y a lo que debe incluir una reforma del sistema.
“Estamos viviendo más de lo esperado y el aumento de edad es impopular. Si bien la edad de retiro no es necesario modificarla, sí será una discusión en la siguiente década”.
¿Qué opina de los cambios en pensiones que introduce el Plan Nacional de Desarrollo (PND) y cuáles son los principales retos?
En el PND se acaba de crear el Piso Mínimo pensional. A una persona que no se gana el salario mínimo, si está afiliado al Sisbén, le puedo dar este amparo de protección mínima vital siempre que le cotice 14 puntos para Beps y 1 punto para riesgos laborales. El susto que le queda a uno es si eso se va a dar en la práctica. Qué va a suceder con el nuevo empleo y con la calidad del empleo. Imaginemos en el campo, si yo tenía un trabajador al que le pagaba el salario mínimo, lo despido, contrato uno nuevo, le hago esto y estoy “legal”.
¿Será que con esta iniciativa voy a poder contratar por debajo del salario mínimo? Además, voy a estar contratando “legal”. Esa es una preocupación enorme, porque esa es una de las normas que tiene la mejor de las intenciones, que es darle paz a los que están desprotegidos, pero preocupa que en el desarrollo no busquen lo positivo de darle cobertura a los que no tienen, sino que desvíe de alguna manera la calidad del empleo y la empiece a llevar hacia desarrollos que no sean tan satisfactorios, como despedir al que tengo para contratar por esto, o que de ahora en adelante contrate solo por esto y no por salario mínimo.
Ya se conocen propuestas de las AFP como gremio para la reforma pensional, pero, ¿usted cree que se den todas las variables para lograrla este año?
Esa pregunta hay que hacérsela a la Ministra de Trabajo, al ministro de Hacienda y al Presidente de la República. El presidente respondió ayer (jueves) que creen y deben presentarla a finales de este año o a comienzos del entrante, siempre que haya consenso. Reformar pensiones es muy complejo desde el punto de vista político.
¿Qué temas tienen que hacer parte de la reforma pensional?
Tiene que cambiar la cobertura, tiene que ser un esquema que sea sostenible desde el punto de vista fiscal y tiene que mejorar la equidad. No puede ser que en Colombia los ricos se lleven los subsidios. Hay que llevarlos a los que más los necesitan y no dándoles $70.000 mensuales, sino la línea de pobreza absoluta o la línea de pobreza. Tenemos que establecer un sistema que sea sostenible en el tiempo y esta no puede estar basada en un sistema piramidal, porque todos sabemos que las pirámides no cuadran.
Pero, ¿cómo?
La propuesta con Asofondos se basa en el ahorro individual, en que los subsidios se les entreguen a las personas que de verdad los necesitan y apunta a que el pilar básico se maneje a través del Fondo de Garantía de Pensión Mínima.
Entonces, ¿el sistema debe migrar a que compitan en igualdad de condiciones?
Nosotros siempre hemos dicho que bienvenido que Colpensiones siga operando como lo hace hoy en día, que cumpla todos los compromisos que tiene, y por qué no, que haya una AFP pública.
¿Han recibido demandas de personas que aleguen que fueron mal asesoradas en el cambio de régimen?
Sí, podemos mostrar de las dos, en las que no hicimos ningún tipo de asesoría y otras en las que nos dan la razón de que hicimos perfectamente la asesoría. Sorprende porque hay dos líneas. Los jueces cada vez están siendo más cuidadosos, porque no a todo el mundo le conviene hacer el cambio de régimen. Deberíamos preguntarnos, ¿por qué a los que estamos en el privado no tenemos subsidio mientras que a los que están en Colpensiones sí les regalan plata? ¿Por qué si estuviese en Colpensiones el Estado me regala plata mientras que por estar en el de ahorro individual no me da nada?, y por el contrario, pongo más para que haya Fondo de Garantías de Pensión Mínima.
La economista cuenta con más de 10 años de experiencia en el análisis económico dentro del sector financiero, en entidades como el Banco de la República
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