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Efectuar una conversión de divisas puede resultar en costos adicionales.
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A la hora de hacer este tipo de compras, es importante tener en cuenta los impuestos y las comisiones que la plataforma o el país cobra
Cada vez más personas optamos por realizar compras en línea, ya sea para adquirir productos que no están disponibles localmente o por la comodidad de recibir los artículos en nuestro hogar. Cuando compramos en el extranjero, es importante considerar que el vendedor utiliza una moneda diferente, lo que implica que al realizar el pago, debamos efectuar una conversión de divisas, lo que puede resultar en costos adicionales.
Por lo tanto, surge la pregunta: ¿Cuál es el método de pago más adecuado para las compras en línea en monedas extranjeras? ¿Cuál es la opción más económica? Además, ¿qué otros aspectos debemos tener en cuenta al comprar en línea?
A la hora de hacer una compra en línea tenemos varias opciones para abonar el pago: mediante transferencia, cuenta bancaria, tarjeta de crédito, tarjeta virtual o un intermediario de pagos principalmente.
Si le ofrecen pagar en su propia moneda, es la plataforma que gestiona el cobro la que aplica el tipo de cambio. La tienda online le mostrará un tipo de cambio que normalmente será de 3% a 5% superior al tipo de cambio real, según datos de la OCU. Por ejemplo, al pagar con tu tarjeta directamente en Amazon Estados Unidos, Amazon te indica que te aplicará unos cargos y comisiones por el servicio.
Una de las tarjetas que más reconocimiento ha adquirido para este tipo de compras es la Tarjeta Revolut Card de Revolut, que te permite extraer dinero en cualquier cajero de forma gratuita y no tiene comisiones ocultas.
Por otra parte, pueden ofrecernos pagar en la moneda del país al que compramos el producto. Esto quiere decir que el emisor de nuestra cuenta bancaria o tarjeta es el encargado de realizar esta conversión de divisas. Se recomienda buscar aquellas tarjetas de débito o crédito que no cobren por hacer compras con moneda distinta.
Al utilizar PayPal, tiene la opción de convertir a US$ pagando con una tarjeta de crédito o directamente en la moneda de la tienda. Pagar con una tarjeta de crédito y luego convertir a US$ incurre en una comisión de 3%.
Hay que tener en cuenta, que pueden cobrarte gastos de aduana, ya que si el producto que decides comprar es de fuera, te cobrarán una serie de impuestos por traerlo al país. Este tipo de impuesto suele aparecer en el pedido con el nombre de "depósitos de tasas de importación". Además, también hay que fijarse en los gastos de envío, ya que estos suelen ser bastante elevados.
La industria aseguradora, a pesar de comercializar un producto constante durante siglos, está lejos de estancarse gracias a lo digital
