“El proyecto está en riesgo debido a la problemática en el peaje ubicado en Turbaco”

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La Concesión Autopistas del Caribe tiene a su cargo la construcción de la doble calzada entre Cartagena y Barranquilla con el fin de mejorar la movilidad, tiempos entre las dos ciudades y conectar los puertos de ambas regiones. Sin embargo, esta iniciativa privada se encuentra detenida por un problema en el peaje de Turbaco, por lo que no han podido iniciar la fase de construcción. Ernesto Carvajal Salazar, gerente general de la Concesión, explicó cuáles serían los efectos colaterales, la inversión que se realiza en el proyecto y el estado en el que se encuentra la vía.

¿Cuántos empleos generaría esta concesión?

Estimamos que, cuando el proyecto se encuentre en el pico máximo de construcción, generaríamos alrededor de unos 7.000 empleos, aproximadamente 4.000 directos y 3.000 indirectos. Si está problemática continua, se perdería la oportunidad de conectar a Cartagena y Barranquilla con doble calzada y se va a perder la posibilidad de generar los 7.000 empleos.

¿En qué consiste el proyecto y cuál fue su inversión?

El fin principal es conectar a Cartagena y Barranquilla en doble calzada. Este es uno de los proyectos más importantes en la Costa Caribe acompañado del canal del Dique. Es una obra de infraestructura vial y el valor asciende a $4,3 billones de los cuales $1,5 billones corresponden a Capex, es decir, a las obras nuevas que se va a construir con toda esa segunda calzada, por la denominada vía la cordialidad y $2,8 billones corresponden a Opex que no es más que la operación y mantenimiento del corredor existente. Hoy tenemos a nuestro cargo todo lo nuevo que se va a construir durante la vida de la concesión, es decir, 35 años.

¿Qué tiempo estimado tienen para terminar la obra?

Nuestro contrato tiene dos fases. La primera es preconstrucción y la segunda es de construcción. Hoy día nos encontramos en la fase de preconstrucción y para nuestro caso, teníamos un tiempo estimado de 18 meses y medio aproximadamente. El plazo se cumplió recientemente, pero nosotros no estamos pasando a fase de construcción, todo a su vez que tenemos activados unos riesgos que no nos permiten acceder a un cierre financiero, ya que tenemos una problemática de peajes.

¿Qué ocurre con el peaje ubicado en Turbaco?

Desde el primero de diciembre de 2021 las talanqueras (barras) del peaje Turbaco permanecen arriba y a la fecha no ha sido posible restablecer el cobro de forma continua. Digamos que con el ministro anterior se logró reactivar este cobro durante 10 días, pero debido a las presiones sociales de un grupo minoritario denominado ‘no más peajes’, de Turbaco, las talanqueras siguen arriba. Su lucha es por el desmonte de estos mimos.

¿Cómo ven este panorama?

Estamos muy optimistas con el nuevo ministro, William Camargo, de que lograremos restablecer el cobro.

¿Tienen algún problema?

El proyecto se encuentra en riesgo debido a esta problemática en Turbaco. Lo otro es el esquema tarifario de la concesión, que no se ha podido ser implementado en los contratos. Estos tienen una resolución del Ministerio de Transporte donde se establecen todas las tarifas de las estaciones de peaje, pero que en nuestro caso, en enero de 2022 debimos haber implementado estas cifras y esto no fue posible debido a la misma problemática del movimiento ‘no más peajes’. Una tercera inconsistencia deriva de una obligación contractual en la instalación de una nueva estación de peaje, pues no hemos iniciado su construcción por las mismas razones.