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El más reciente reporte de Colfecar detalló que los más de 600 cierres registrados hasta agosto han dejado pérdidas de $1,7 billones en los transportadores
Colfecar actualizó las cifras del bloqueómetro, en el que se contabilizan cuántos cierres tienen las carreteras del país, y las afectaciones económicas para los transportadores. Con corte a agosto ya se contabilizan 624 bloqueos, que han dejado pérdidas por $1,7 billones.
Si se detalla el por qué de los bloqueos, se reveló que 187, es decir 30%, se produjeron por manifestaciones de agricultores. De hecho, la mayoría de las protestas, 117, se dieron en julio, lo que coincide con el paro arrocero.
El segundo factor por el que más se presentan estos cierres son las protestas por incumplimientos del Gobierno Nacional, por este motivo van 79 bloqueos, y le siguen los temas de infraestructura con 71.
Según lo explicado por Colfecar, es en esta categoría donde se agrupan temas como los deslizamientos de tierra, derrumbes, pérdidas de banca, y demás eventos como lo de la vía al Llano, que no obedece a una protesta o manifestación.
“El sector transporte enfrenta graves flagelos que están afectando drásticamente su productividad y en consecuencia sus ingresos, uno son los bloqueos por comunidades inconformes. En lo corrido de este año contabilizamos 624 bloqueos que han generado perdidas al sector transporte de $1,7 billones. Por ejemplo, continúa un bloqueo en la vía Cartago-Tuluá que completa 187 horas de cierre, afectando el transporte entre el sur occidente y el centro del país”, dijo Nidia Hernández, presidente ejecutiva de Colfecar.
El top cinco lo completan temas derivados del servicio de energía con 37 cierres y protestas por temas de educación 36.
La mayoría de los motivos de los cierres, puede decirse, son protestas, las cuáles en su mayoría se han registrado en Tolima, que en lo que va registra 88 bloqueos, seguido por Bolívar con 57 y Atlántico con 54. En cuarto lugar, aparece Meta con 43 restricciones y Huila con 39.
“Otro tema que nos agobia es la ola de inseguridad que se manifiesta en múltiples formas: extorsión a empresarios de transporte, cobros ilegales a conductores, incineración de vehículos de carga, hurtos a plena luz del día, algunos vehículos de carga son llevados a presuntos resguardos indígenas o zonas controladas por grupos narcoterroristas, donde el Ejército y la Policía no pueden ingresar, paros armados decretados por el ELN que paralizan completamente la movilidad de vehículos de carga y pasajeros, además de confinar a la población civil. En departamentos como Cauca, Huila, Chocó, Antioquia, Norte de Santander y Arauca no se puede transitar las 24 horas del día, lo que limita a un sector como el transporte”, detalló Hernández.
“En lo corrido de este año ya hemos contabilizado 624 bloqueos, los cuales han generado pérdidas para el sector transporte que ascienden a $1,7 billones”.
“Nos preocupa el silencio del Gobierno en materia de seguridad. Hay que darle tranquilidad a los colombianos y es necesario que se refuercen las Fuerzas Militares”.
El mes con más cierres ha sido julio, con 159 bloqueos, que le han hecho perder 2.323 horas a los transportadores. Desde esa misma lectura se destaca marzo, con 118 cierres, pero particularmente en este mes se perdieron 2.939 horas, es decir que las afectaciones fueron más severas.
Si se revisa el bloqueómetro al cierre de 2024 se registraron 801 cierres, es decir en 2025 ya se alcanzó 78% de lo contabilizado el año anterior.
El mes con más bloqueos de 2024 fue septiembre con 149 eventos, y coincide con el paro camionero. El segundo mes con más restricciones fue mayo con 85 y octubre con 74.
Los datos de Colfecar dan muestra que las pérdidas económicas del año anterior ascendieron a $4,4 billones. A esto se suman los 742 bloqueos de 2023, que dejaron pérdidas por $3,6 billones, es decir, si se suma desde 2023, hasta agosto de 2025, van 2.167 cierres, con mermas económicas que ascienden a $9,7 billones.
El problema de estos bloqueos también está atado con la inseguridad, pues los transportadores aseguran que mientras sus vehículos están detenidos, la carga queda expuesta, pero también se pone en riesgo la vida misma de los conductores.
A eso se suman las horas pérdidas, lo que dispara los costes logísticos, y pone en riesgo ciertos cargamentos, sobre todo de los productos perecederos, que derivan en pérdidas no solo de los transportadores, también de los productores.
Según lo explicado por Hernández, el combustible representa 40% de los costos operativos del transporte, y aunque en el último paro camionero se acordó que no se tocaría el precio del diésel, la ley de financiamiento que está en discusión en el Congreso propone un encarecimiento a través del gravamen del IVA. El gremio estima que con lo expuesto en el articulado de la tributaria, en 2026 se encarecería 8,1% el combustible, lo que no solo le pegaría al sector, si no a la ciudadanía en general, ya que afecta los precios finales de varios productos.
Villar aseguró que si el incremento del salario mínimo es muy alto, se dificultará reducir la inflación, mientras que el jefe de Estado aseguró que se controla acaban con la especulación del gas y reduciendo la tasa de interés
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