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Copa Claro de fútbol contó con 46.300 participantes
Es un orgullo para todos nosotros ver cómo niños y niñas de todo el país disputaron esta semana las finales nacionales de la Copa Claro de Fútbol en Cali con tanta pasión y alegría. Cerca de 1.200 jóvenes que, luego de casi ocho meses de competencia, de haber superado la fase municipal, y haberse proclamado campeones en sus respectivos departamentos, nos contagiaron con su talento, su compromiso con el deporte y sus sonrisas esperanzadoras.
Cuando trajimos este torneo a Colombia, hace ya nueve años, Claro por Colombia lo hizo con el objetivo de cambiar la vida de adolescentes en condiciones de vulnerabilidad mediante la práctica del fútbol. Teníamos la certeza de que seríamos una alternativa real de integración, desarrollo de habilidades y sana convivencia para los más de 350.000 jugadores que nos han acompañado a lo largo de este tiempo. Contamos con casi una década alejándolos de las drogas, el delito, las pandillas y, en el caso de las niñas, de los embarazos no planeados.
Claro por Colombia, el programa de Responsabilidad Social Corporativa de Claro, es consciente de que este torneo tiene un verdadero sentido social y que se ha convertido en un semillero de valores y sueños. Durante nuestros recorridos por los 32 departamentos, hemos tenido la oportunidad de conocer historias y lugares maravillosos: desde los mares de siete colores de San Andrés y Providencia, el río Amazonas con sus delfines rosados, el Cabo de la Vela en las playas de La Guajira, pasando por la Laguna de La Cocha en Nariño o la escalera de piedra en Tolima, hasta llegar al Parque Nacional de Jirijirimo en Vaupés, la Serranía de la Macarena o las altas cumbres nevadas de Boyacá.
Aunque faltan muchos otros sitios mágicos por mencionar, lo que más nos reconforta es la alegría de los jóvenes, hombres y mujeres, que juegan este torneo y que incluso nos preguntan a menudo cuándo comenzará de nuevo.
La Copa Claro de fútbol nace como alternativa para ocupar el tiempo libre de los muchachos, evitarles caer en vicios o situaciones indeseables, de crear retos y de mostrarles que sí es posible cumplir sus sueños. Las sonrisas, la alegría, la pasión y la disciplina que hemos visto en los jóvenes colombianos nos reconfortan. En 2017 el torneo contó con la participación de 46.366 participantes entre los 14 y los 22 años, inscritos en 2.055 equipos de los cuales 465 fueron femeninos y 1.590 masculinos, oriundos de 405 municipios. La semana pasada en Cali, sede por cuarto año consecutivo de las finales nacionales, los 68 equipos campeones departamentales jugaron 116 partidos. Para ello, se necesitó la participación logística de más de 500 personas y se ocuparon cerca de 350 habitaciones de 18 hoteles, contribuyendo a la economía de la capital del Valle del Cauca. Adicional a esto, cinco de los jóvenes que representan al país en el mundial Sub 17 que se está jugando en la India, pasaron por la Copa Claro de Fútbol.
Vale la pena mencionar que este torneo también se ha convertido en un semillero de talento femenino y masculino. El primer campeonato profesional femenino 2017 contó con la participación de un 53 % de jugadoras que pasaron en algún momento de su carrera por la Copa Claro de Fútbol. En el torneo masculino, se registraron 160 jugadores de estos en las plantillas de los equipos del fútbol profesional colombiano.
Quiero felicitar con total entusiasmo a los campeones de esta edición: Botín de Oro del departamento de Santander en la categoría femenina y Proyecto 11 de Palmira, Valle del Cauca en la masculina. Gracias por dejarlo todo en la cancha. El próximo año cumpliremos una década en el país y Claro por Colombia, a través de la Copa Claro de Fútbol, traerá muchas sorpresas para los jóvenes de los 32 departamentos.
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