El mejor termómetro es la inversión

Hay días en que los nubarrones de la desconfianza soplan sobre el panorama nacional por todo el frenesí de sucesos, no siempre positivos, que pueden empañar la perspectiva económica, pero hay otros en que todo se más claro y el optimismo se convierte en un verdadero motor. El pasado fin de semana se conoció el comportamiento de la inversión extranjera directa que de acuerdo con cifras del Banco de la República, al 31 de octubre de 2013 alcanzó US$13.980 millones, una cifra verdaderamente importante.

La inversión extranjera directa es el mejor termómetro de la confianza de los empresarios sobre las perspectivas del país. Este indicador de la economía continúa en niveles históricamente altos, lo que refleja confianza en los logros de la política económica. Hay un detalle bien interesante y es que esa inversión foránea está llegando a todos los sectores. Según lo muestran los datos de la balanza de pagos Banco de la República, al segundo trimestre de 2013, el sector de petróleo y minería participaba con 58%, seguido por industria (10,6%), transporte y comunicaciones (10,1%), comercio (9,5%) y establecimientos financieros (5,4%).

Otra dato importante, revelado ayer, es la caída de 0,4% que registraron las importaciones entre enero y septiembre de este año con respecto al mismo periodo de 2012. Las compras externas bajaron de US$44.237 millones a US$44.080 millones. El resultado es que la balanza comercial presentó un superávit de US$1.767 millones.

En cuanto a lo que compran los empresarios colombianos en el exterior tenemos que las manufacturas representan lo que más jalona las importaciones con 76,4%, seguido de combustibles y productos de industrias extractivas 12,6% y productos agropecuarios, alimentos y bebidas 10,9%.

La moraleja de las dos situaciones: buen nivel de la inversión extranjera y la caída de las importaciones es que el país mejora el cierre de año a pasos agigantados consolidándose como una economía sana que es ejemplo en el mundo. Lo que debe hacer ahora el Gobierno Nacional es concentrarse en mejorar notablemente la calidad de vida de los colombianos por la vía de la generación de empleos formales que puedan asegurarle a los colombianos un nivel de ingresos superiores y fijos que sostenga a sus familias y le garantice a sus hijos una educación completa. El país económico no puede quedarse en reportar cifras que reflejen el buen desempeño de la economía, debe traducirse en acciones que vea la gente como la apertura de nuevas empresas.

Las cifras en solitario ayudan a que los empresarios nacionales y extranjeros crean en el país, pero la gente necesita más acciones concretas.