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En este periodo, el grupo ha recortado su tráfico de pasajeros cerca de 88%, con una disminución de la capacidad de 78,6%
IAG, grupo propietario de las aerolíneas Iberia, Vueling, IAG y Aer Lingus, ha cerrado el tercer trimestre del año con un resultado de las operaciones antes de partidas excepcionales negativo de US$1.537 millones, frente a los US$1685 millones ganados en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Sus acciones se comportan hoy de forma muy volátil, con descensos del 5% en la apertura que a mediodía se convierten en un avance cercano al 2%.
La compañía ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) un adelanto de sus cuentas, que presentará de forma más detallada el próximo 30 de octubre.
IAG ha reducido sus ingresos totales un 83%, hasta los US$1.418 millones de euros. En este periodo, el grupo ha recortado su tráfico de pasajeros un 88%, con una disminución de la capacidad, expresada en términos de asientos-kilómetros ofertados, del 78,6%. Así, el coeficiente de ocupación ha caído en 38,8 puntos porcentuales, hasta el 48,9%.
El grupo ha anunciado que, "en respuesta a la alta incertidumbre en el entorno actual", planea que su capacidad en el cuatro trimestre "no sea superior a un 30%" comparado con el de 2019. Con esta previsión, IAG "ya no espera alcanzar el punto de equilibrio en términos de flujos de efectivo netos de las actividades de explotación durante el cuarto trimestre de 2020.
La compañía ha señalado que las reservas recientes "no han evolucionado como se esperaba previamente debido a las medidas adicionales implementadas por muchos gobiernos europeos en respuesta a una segunda ola de infecciones de covid-19, incluyendo un aumento en los confinamientos locales y la extensión de los requisitos de cuarentena a los viajeros por parte de un número creciente de países".
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