MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
La inclusión financiera es el objetivo de los bancos centrales de países emergentes y para los de economías avanzadas es la eficiencia y seguridad de pagos
El Banco de Pagos Internacionales (BIS, por su sigla en inglés) confía que los bancos centrales procederán con cautela en los ensayos que realizan para operar su propia moneda digital, antes de dar el paso para formalizar su manejo.
El gerente general del BIS, Agustín Carstens, dijo que “como guardianes de la estabilidad del sistema financiero, los institutos centrales no pueden subestimar la necesidad de la coordinación internacional en temas tecnológicos, legales y económicos”.
Al participar en el Seminario del Hoover Institution Policy, en Basilea, Suiza, Carstens tomó los casos del banco central de Las Bahamas; el Banco Popular de China y la Fed de Boston, para mostrar que actualmente se están realizando programas piloto para experimentar con el manejo de monedas digitales.
Luego presentó los resultados de una encuesta levantada por la institución que precede entre bancos centrales, misma que arrojó que 86% de ellos está actualmente experimentando con algún tipo de moneda digital.
De acuerdo con la citada encuesta, la inclusión financiera es el principal motivo de los bancos centrales de mercados emergentes para experimentar y desarrollar monedas digitales; mientras que para las instituciones centrales de economías avanzadas, las principales áreas de interés están relacionadas con la eficiencia y seguridad de pagos.
Carstens explicó que, “si en algún momento las monedas digitales existen, los bancos centrales deben jugar un papel fundamental”.
“Los bancos centrales deben garantizar la estabilidad del valor de las monedas digitales, asegurar la elasticidad de la oferta agregada de dicho dinero y garantizar la supervisión y seguridad de operación del sistema”.
Bitcoin y Diem de Facebook
El Gerente General del BIS explicó que no es deseable ni realista suponer que las monedas digitales operadas por bancos centrales reemplazarán en algún momento a las cuentas bancarias o al manejo de efectivo.
“Necesitamos establecer la identificación adecuada, la privacidad en el sistema de pagos y la seguridad del manejo tanto para los usuarios como para los destinatarios. Hay que recordar que el dinero digital actualmente existe en forma de reservas de valor del banco central”.
Las monedas digitales emitidas de forma privada, los llamados tokens, no son monedas separadas per se, pues dependen de bancos centrales para la finalidad de la compensación y liquidación.
“Hay un cordón umbilical que los conecta al sistema financiero existente”.
Luego, tomó los casos del bitcoin y el diem, la moneda que sustituyó a Libra de Facebook, para advertir que el criptoactivo de Facebook buscó aprovechar la credibilidad del respaldo o vínculo hacia una canasta de monedas soberanas y de curso legal para operarla.
El bitcoin en cambio, es un activo especulativo cuyo valor real está sustentado en el consenso de los participantes del sistema. No tiene respaldo, soporte ni seguros para los inversionistas.
“Aunque el bitcoin puede haber tenido la intención de ser un sistema de pago alternativo sin la intervención de autoridades, se ha convertido en una combinación de una burbuja, un desastre ambiental y un esquema Ponzi”, declaró el ex gobernador de Banco de México.
El gobierno dijo que esperaba recaudar 16.000 millones de reales (2.900 millones de dólares) más el próximo año como resultado de esta medida
La coordinadora de Opinión Pública del CEP, Sandra Quijada, señaló que la aprobación a Boric subió tres puntos, hasta 30%
La reforma judicial en México, presentada por el expresidente Amlo, será revisada por la Suprema Corte de Justicia