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Las ventas de viviendas nuevas en todo el país probablemente se reducirán en otros 50 millones de metros cuadrados tanto este año como el próximo
La crisis inmobiliaria de China puede continuar durante dos años más antes de ganar estabilidad, según un ex funcionario del banco central.
Las ventas de viviendas nuevas en todo el país probablemente se reducirán en otros 50 millones de metros cuadrados tanto este año como el próximo, y el total anual de 2025 se estabilizará en alrededor de 850 millones de metros cuadrados, dijo Sheng Songcheng, ex director del departamento de estadísticas y análisis del Banco Popular de China. dijo en un foro en Shanghai el sábado. La maltrecha industria dejará de ser un lastre para la inversión y el crecimiento económico después de eso, añadió.
Los comentarios de Sheng se produjeron cuando la caída en las ventas de viviendas chinas se aceleró en diciembre, incluso después de que las autoridades implementaron más medidas de apoyo que incluyeron relajar las restricciones a la compra de viviendas en las principales ciudades.
La crisis inmobiliaria sin precedentes del país le ha costado a la economía un motor de crecimiento clave en los últimos tres años y ha aumentado el riesgo financiero tras una ola récord de impagos por parte de los promotores.
El mercado inmobiliario experimentó brotes verdes en noviembre y diciembre, situando las ventas a nivel nacional en todo el año en alrededor de 950 millones de metros cuadrados, dijo Sheng en el foro del sábado. Eso significaría que el ritmo de caída de las ventas se moderaría a la mitad en 2023 con respecto al año anterior, según las estimaciones de Sheng.
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