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Directores regionales de la Junta Nacional de Relaciones Laborales de EE. UU. han emitido más de 100 denuncias alegando tácticas ilegales antisindicales
Los baristas sindicalizados de Starbucks se están preparando para ir a huelga la próxima semana y alterar uno de los días más ocupados de la cadena de café, con el objetivo de asegurar un contrato después de años de conversaciones esporádicas e infructuosas.
Starbucks Workers United, que representa a empleados en unas 550 de las aproximadamente 10.000 tiendas operadas por la compañía en Estados Unidos, dijo que los miembros votaron para otorgar al liderazgo sindical la capacidad de convocar una suspensión laboral en cualquier momento si no se cumplen sus demandas. Ahora se están preparando para iniciar huelgas en más de 25 ciudades el 13 de noviembre. Esa es la fecha del popular “Red Cup Day” de la compañía, que ha sido un objetivo previo del sindicato. Las acciones laborales podrían expandirse si no hay avances hacia la firma de un contrato y la resolución de disputas legales, dijo el sindicato, que acusó a Starbucks de negarse a negociar de manera justa.
“Estamos listos y dispuestos a participar en la huelga más grande en la que hemos estado”, dijo Silvia Baldwin, una barista de Filadelfia que es una de las delegadas que representan al sindicato en las negociaciones. “Si la empresa quiere evitar eso, puede llegar a un acuerdo con nosotros hoy mismo”.
Las acciones de Starbucks subieron 2,7% a la 1:11 p. m. en las operaciones del miércoles en Nueva York. Las acciones han caído alrededor de 13% en lo que va del año hasta el cierre del martes, frente a un avance de 15% del índice S&P 500.
En una declaración enviada por correo electrónico, la vocera de Starbucks Corp., Jaci Anderson, dijo: “Estamos decepcionados de que Workers United, que solo representa alrededor de 4% de nuestros socios, haya votado para autorizar una huelga en lugar de regresar a la mesa de negociaciones. Cuando estén listos para volver, nosotros estamos listos para hablar”. Starbucks ha acusado al sindicato de presentar propuestas financieramente insostenibles y ha dicho que ya ofrece “el mejor trabajo en el comercio minorista”, con baristas que reciben un salario promedio de más de US$19 por hora, y una compensación total superior a los US$30 por hora al incluir los beneficios. La amenaza de huelga marca la última escalada en los esfuerzos del sindicato por presionar a Starbucks. Los empleados comenzaron a votar para sindicalizar algunas tiendas en EE. UU. hace casi cuatro años, pero aún no han conseguido un acuerdo de negociación colectiva. Después de años de conflicto y controversia de alto perfil, ambas partes anunciaron en febrero de 2024 que habían acordado trabajar juntas para resolver sus hostilidades. Sin embargo, las conversaciones se rompieron a finales del año pasado, y desde entonces las tensiones han ido en aumento.
Los directores regionales de la Junta Nacional de Relaciones Laborales de EE. UU. han emitido más de 100 denuncias contra la compañía, alegando tácticas ilegales antisindicales, como el cierre de tiendas, el despido de activistas y la negativa a negociar de manera justa. Starbucks ha negado cualquier irregularidad. Los delegados de Workers United que representan a los empleados en las tiendas sindicalizadas de Starbucks votaron en abril para rechazar la propuesta de contrato de la empresa, la cual, según los organizadores, se quedaba corta al garantizar solo aumentos anuales de al menos 2% y no ofrecer garantías de que los empleados recibirían suficientes horas de trabajo para calificar a los beneficios de la compañía.
El sindicato afirma que la empresa se ha negado a presentar una propuesta mejorada desde entonces, y que alcanzar un acuerdo contractual le costaría a Starbucks menos de los aproximadamente US$100 millones que la compañía genera en ventas globales en promedio por día. El salario inicial para los baristas de Starbucks en muchos estados es tan bajo como US$15,2 por hora, según el sindicato.
Workers United ha organizado huelgas durante las fiestas de fin de año en los últimos años. En 2024, Starbucks dijo que una huelga de Workers United antes de Navidad provocó el cierre temporal de unas 60 tiendas, mientras que la gran mayoría de sus locales permanecieron llenos de clientes. El sindicato afirmó que esa suspensión laboral, en realidad, causó cierres temporales en cientos de tiendas.
Según el sindicato, los empleados están preparados para realizar huelgas sin una fecha de finalización establecida que duren más tiempo y sean más grandes que las anteriores, y han obtenido compromisos de decenas de miles de aliados para no comprar en Starbucks durante una suspensión laboral. Miles de baristas participaron en la votación para autorizar la huelga, con 92% votando a favor, según Workers United.
“La diferencia con esta acción es que es indefinida, y estamos listos para seguir aumentando la presión, si es necesario”, dijo Jasmine Leli, barista y líder sindical en Búfalo, Nueva York. Es un momento delicado para la empresa. Starbucks ha estado tratando de ejecutar un plan de recuperación bajo el director ejecutivo Brian Niccol. Los baristas, que son fundamentales para ese plan, a veces han mostrado descontento con los cambios implementados durante el último año bajo Niccol. Algunos empleados sostienen que uno de los problemas es una nueva política que les exige escribir mensajes alentadores en los vasos de los clientes, parte de un esfuerzo por hacer que las cafeterías sean más acogedoras, lo que consideran una carga adicional que dificulta preparar las bebidas bajo controles de tiempo cada vez más estrictos.
Una ronda de cierres de tiendas este pasado septiembre también deterioró las relaciones con los trabajadores por hora. Starbucks cerró cientos de locales en todo el país, incluidos 59 establecimientos sindicalizados, con solo unos días de aviso.
“Nuestros clientes pueden estar seguros de que nuestros socios estarán listos para atenderlos en la gran mayoría de nuestras 10.000 tiendas operadas por la compañía y 7.000 franquicias en toda Norteamérica durante la temporada navideña, sin importar los planes del sindicato”, dijo.
Starbucks ha señalado que recibe más de un millón de solicitudes de empleo al año, además de haber incrementado el personal en las tiendas y mantener una tasa de rotación que es casi la mitad del promedio de la industria. “Los hechos muestran que a la gente le gusta trabajar en Starbucks”, dijo la compañía.
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