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Bancos siguen concentrando poder tras 5 años de crisis

sábado, 14 de septiembre de 2013
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Ernesto Rodríguez

Antes del 15 de septiembre de 2008, la economía mundial parecía que se encontraba en un excelente momento, o al menos eso era lo que creía el común denominador de la población.

Sin embargo, un día antes, el domingo 14, mientras la mayoría descansaba, Richard Fuld, presidente ejecutivo de Lehman Brothers Holdings Inc, trataba de solucionar lo que a la postre sería la quiebra del banco más antiguo y uno de los más importantes de Estados Unidos, y que llevaría al principio de una crisis económica mundial de la que apenas se empieza a ver una recuperación.

Ese fin de semana previo al anunció de la bancarrota de Lehman Brothers, los máximos ejecutivos de los otros  grandes bancos de inversión de Wall Street (Bank of America Corp, Merrill Lynch & Co y Goldman Sachs) libraban sus propias batallas conociendo de antemano que el hundimiento de Lehman los afectaría. Dejando en evidencia que tener el control financiero del mundo en pocas instituciones no es lo más aconsejable y que con la caída de uno se produciría un efecto domino con el resto.

Cinco años después, para algunos, todo sigue igual. “En la actualidad los principales bancos del mundo siguen desarrollando políticas expansionistas sin ningún tipo de control lo que genera una gran dependencia global en pocas instituciones, algo que es muy peligroso porque la enseñanza que de dejó la crisis de 2008 es que si cae uno caen todos”, explicó Felipe Campos, jefe de  investigaciones económicas de Alianza de Valores.

El comienzo del fin

La bancarrota de Lehman  empezó a vislumbrarse como una opción cada vez más real luego de que las pérdidas en el tercer trimestre superaran los US$4.000 millones y las agencias calificadoras advirtieran que si no levantaba cabeza durante el fin de semana, podría enfrentar una rebaja en su nota.

Las llamadas de auxilio que presentó Fuld al gobierno y a la Reserva Federal nunca se oyeron y las declaraciones del entonces ministro de Hacienda de Estados Unidos, Hank Paulson, en las que dijo que el gobierno no iba intervenir para ayudar al banco y que la responsabilidad eran de las otras entidades fueron la sentencia final y el adiós de una de las instituciones más tradicionales de ese país.

La crisis

La noticia llegó como un balde de agua fría para la economía mundial y según los expertos se presentó por culpa de los créditos hipotecarios subprime, una modalidad crediticia que se caracteriza por tener un nivel de riesgo superior. La crisis trajo muchos problemas y no solo para Estados Unidos si no también para el resto del mundo, en donde las principales economías desarrolladas vieron como su crecimiento económico y el desempleo se veían afectados.

El crecimiento económico en Estados Unidos mostró una desaceleración y un estancamiento que se sigue manteniendo, aunque no tan marcado como en años anteriores. La tasa de desempleo también aumentó y llegó a su punto máximo en octubre de 2010. 

Cinco años después

Luego comprender que uno de los principales problemas es el poder que tienen los grandes bancos, en la actualidad entidades como Goldman Sachs, Bank of America Corp Merrill Lynch y Morgan Stanley continúan siendo los principales protagonistas de las finanzas mundiales y sus planes de expansión no se detienen.

Después de la crisis se creó la ley Dodd-Frank que busca mantener la estabilidad financiera de EE.UU. Sin embargo, hasta la fecha solo se ha puesto en práctica 40% de lo que profesa la norma.

Germán Nova, profesor de economía de la Universidad Nacional, asegura “que las medidas que se tomaron simplemente sirvieron para apaciguar la crisis en el momento y el verdadero problema de raíz, que es el poder que tienen los bancos, ni se ha tenido en cuenta. Es como una hidra a la que se le cortan las cabezas y siguen saliendo más”. La regla Volcker, que busca prohibir a los bancos hacer inversiones especulativas en beneficio propio, aún no se ha puesto en marcha.

Soluciones extremas para evitar una crisis

Según los expertos existe una serie de soluciones extremas que sin duda alguna servirían para prevenir futuras crisis y para ponerles un control a las entidades financieras. Algunas de ellas son: recortar las bonificaciones para los banqueros, no permitir el proceso de expansión de los bancos, entre otras. Para Cesar Ferrari, Ph.D. en economía y profesor de la Pontificia Universidad Javeriana “aunque estas soluciones en la práctica son imposibles de llevar a cabo serían muy buenas para evitar que sucedan crisis”. “Existe también otra medida que sería la de la regulación de los mercados, ya que la evidencia demuestra que estos no se corrigen por sí solos”, agregó.

Las opiniones

 
Felipe Campos 
Jefe de investigaciones económicas, Alianza Valores  
“En la actualidad los principales bancos del mundo siguen desarrollando políticas expansionistas sin ningún tipo de control lo que genera una gran dependencia global en pocas instituciones”.
 
Cesar Ferrari 
Ph.D. en economía y profesor de U. Javeriana 
“Existe otra medida que sería la de la regulación de los mercados, ya que la evidencia demuestra que estos no se corrigen por sí solos, sino que necesitan ayuda“.
 

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