Santa Marta, ejemplo claro de recuperación económica sostenida en la región

Santa Marta es hoy por hoy una de las ciudades que reporta mejores indicadores macroeconómicos, una buena noticia que llega en medio del marco de sus 500 años de fundación.

Según los últimos informes del Dane, la capital del Magdalena es actualmente la tercera ciudad del país con menor tasa de desempleo, 8,7%; la inflación más baja, con 1,4%; y está entre las que logró reducir significativamente la pobreza monetaria para 2024: 3,6 pp.

“Estos indicadores reflejan una recuperación sostenida y una relativa estabilidad estructural”, mencionó Luz Dary Rodríguez Luna, directora del programa de Economía de la Universidad del Magdalena.

Y es que, en el caso del desempleo, Santa Marta fue la única que, junto con Valledupar, logró registrar una tasa inferior al promedio nacional. Y en la inflación, es la única que quedó por debajo del rango meta de inflación del emisor que es 3%.

Mayor inversión, formalización laboral e incentivo para el emprendimiento son algunas de las estrategias que están mejorando los indicadores de una ciudad que se sostiene, principalmente, de actividades económicas como el comercio, reparación de vehículos y el alojamiento.

Pero, más allá de su músculo económico, ¿qué acciones concretas están llevando a cabo para impulsar la economía de la ciudad samaria?

Para la Alcaldía de Santa Marta, la reducción del desempleo “ha sido posible gracias a una estrategia integral que incluye la Ruta 500+ de Empleabilidad, la Mesa Distrital de Empleo, y la puesta en marcha de la Agencia Pública Distrital de Empleo, con más de 2.000 colocaciones certificadas en 2025”.

En la reducción del costo de vida, Rodríguez señala que “es favorable dado que hay condiciones estructurales locales favorables (como costos de vida relativamente estables y menores presiones sobre bienes no transables), y una cadena de abastecimiento eficiente, posiblemente apalancada por la logística portuaria y el acceso a productos agrícolas de toda la región Caribe”.

Esto, además, acompañado de estrategias del distrito para impulsar la producción local, apoyar canales de comercialización directa como las Ferias Campesinas y generar más ingresos para la ciudadanía a través del empleo digno y el emprendimiento”, afirmaron desde la Alcaldía municipal.

En cuanto a la pobreza monetaria, si bien hubo una disminución, Santa Marta sigue dentro de las 10 ciudades con mayor incidencia en este indicador, por lo que sigue siendo un reto latente. Para aliviar esta cifra, la capital viene trabajando en el crecimiento del empleo y en programas de transferencia.

Así que, para que la capital del Magdalena siga desarrollando su industria y economía, debe seguir trabajando en superar sus retos, por ejemplo, la informalidad, pues en este indicador sí se raja: es la cuarta con mayor actividad laboral no formalizada a mayo, según el Dane.

“Para ello estamos en una ruta clara sobre cómo avanzar en una mesa distrital de formalización, de la mano de entidades locales y nacionales para reducir la informalidad laboral”, explicó Carlos Jaramillo, secretario de Desarrollo Económico de Santa Marta.