Los cambios tributarios y laborales están en la agenda para el crecimiento

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En primer lugar, el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) sintió un bajonazo histórico, con un leve incremento de 1,1% en la actividad durante el primer trimestre del año, sin sentir aún los grandes efectos de la emergencia, pero hubo grandes contracciones de -15,7% en el segundo trimestre (la mayor en la historia) y de -9% en el tercer trimestre.

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Con ese panorama, la proyección de decrecimiento por parte del Ministerio de Hacienda para todo el año es de -6,5%, más negativa que -6% que había previsto a mediados del año en el Marco Fiscal de Mediano plazo, mientras que la apuesta del Banco de la República es de -7,4%, que es más optimista que la dada en su penúltima revisión, en la que había pronosticado un golpe económico superior a 8%.

Todo lo anterior también elevó la deuda externa nacional y, a septiembre, este índice llegó a representar 51,6% del Producto Interno Bruto, y el Gobierno, autoridades económicas y expertos estiman que seguirá subiendo este y el próximo año a un promedio de 66% del PIB.

Como consecuencia de la coyuntura, recientemente, el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, confirmó que, a pesar de que la administración de Iván Duque es consciente de lo perjudicial que puede ser una nueva reforma tributaria en medio de la crisis, la necesidad de obtener mayores recursos de recaudo obligará al Gobierno a presentar su tercera tributaria en el primer trimestre del próximo año.

“Nos toca hacer una reforma y conseguir la plata porque la deuda hay que pagarla. En este momento seguimos en medio de la crisis y tenemos que seguir en el canal de continuar los programas de gasto y no suponer que en este momento la gente puede pagar más impuestos de los que pagó en condiciones normales. No vale la pena presentarla en este año. Por eso, el plan de reactivación económica que el Gobierno emprendió conjuntamente con el sector privado contempla mega inversiones en infraestructura”, comentó el jefe de la cartera.

Otro de los desafíos del Gobierno es la recuperación del empleo que, en los últimos meses y gracias a la reapertura gradual de la actividad económica ha mostrado síntomas de mejoría y, a octubre, la tasa de desempleo se ubicó en 14,7%. Por ello, el papel de las grandes compañías nacionales y multilatinas para la dinamización del mercado laboral será vital en este proceso. Aún son cerca de dos millones de colombianos que pasaron de estar ocupados a vivir el complejo problema del desempleo, razón por la que la reforma laboral también es una prioridad para la reactivación económica.

En ese sentido, Duque permitió que, hasta febrero de 2021, las personas que hayan perdido su trabajo o disminuido sus ingresos como resultado de la emergencia puedan retirar una parte del ahorro de sus cesantías para compensar esa afectación. Hasta el momento, cerca de 1,2 millones de colombianos han accedido a este beneficio por aproximadamente $2 billones.

Para una mejor dinámica en el mercado laboral, el Ministerio del Trabajo también busca regular el empleo remoto o teletrabajo, a través de un proyecto de ley que pretende fijar las normas para empleadores y empleados que opten por esta modalidad que se potencializó con la entrada del aislamiento obligatorio. La iniciativa cuenta con el apoyo de gran parte del Congreso y el sector privado, pues beneficiará a toda la cadena del sistema.

Frente al difícil, pero promisorio panorama, Rappi, una de las empresas de mayor crecimiento en Colombia, puntualizó que su contribución para la reactivación de la economía se fundamentará en brindar mayores oportunidades de empleo y analizar las nuevas realidades del mercado, con diferentes aliados, como Davivienda y Visa.

“Queremos seguir construyendo un ecosistema sólido, en donde todos tengan la posibilidad de desarrollarse. Nuestra intención es abrir nuestras puertas a todos aquellos que quieran ser parte de esta nueva realidad, acompañarlos y hacerlos sentir verdaderamente nuestra oferta de valor”, dijo Matías Laks, gerente general de Rappi para Colombia.

Los planes de las firmas locales para 2021
Desarrollo digital, generación de empleo, diversificación de mercados y trabajo social son las prioridades de los grandes agentes del sector privado para la recuperación.

Para los usuarios, la idea de la firma es trabajar con un portafolio cada vez más amplio en materia de compras en un supermercado, servicios de aliados especializados o con productos financieros.

Terpel y la equidad de género
Sylvia Escovar, presidente de Terpel, destacó que, como parte de su contribución para la reactivación del empleo, la empresa viene mejorando sus estándares de contratación equitativa para hombres y mujeres. Por ello, la compañía fue reconocida como una de las tres con mayor equidad de género en el sector de comercio, según el Ranking PAR 2020.

“Creemos que la diversidad es una ventaja competitiva. Cuando se consolidan equipos de trabajo plurales, se enriquecen las iniciativas y los proyectos”, dijo.

Éxito y el medio ambiente
El Grupo Éxito presentó su modelo de ganadería sostenible para mejorar la conservación de ecosistemas, calidad cárnica y bienestar animal. Por eso, hará monitoreo satelital de los predios de sus proveedores para verificar que cumplan los límites de la frontera agrícola y la cobertura boscosa, y garantizar que la práctica sea en armonía con el medio ambiente.

“Como empresa, tenemos la obligación de trabajar por un país más justo y sostenible”, dijo Carlos Mario Giraldo, presidente del grupo.