Motos ponen 63% del parque automotor y sus ventas crecen 37% en promedio

Bogotá amaneció este jueves 30 de octubre en medio de bloqueos y movilizaciones de motociclistas que rechazan las restricciones impuestas por la Alcaldía para los días de Halloween. Su poder para alterar el flujo de la movilidad es una muestra del tamaño que tiene este segmento.

El parque automotor de Colombia está conformado por 20,9 millones de vehículos y 63% de ese total son motocicletas, es decir, por las vías del país ruedan 13,2 millones de ellas y sus ventas, entre enero y septiembre, crecieron 37% en promedio.

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Tal como ya lo han señalado en diversas ocasiones los expertos en movilidad, las motos incrementan a un ritmo superior porque son un vehículo más asequible para una población predominantemente de clase media-baja. Sus costos de compra y manutención son inferiores frente a los carros. Además, están exentas del pago en peajes.

Hay que mencionar que la entrada de la economía colaborativa abrió un renglón en el que las motos son vitales para los domicilios y el transporte de pasajeros. Con ello, se han convertido en la herramienta para generar ingresos en muchos hogares.

En los primeros nueves meses de este año, la industria ha vendido 817.958 unidades, cifra que se traduce en un aumento anualizado de 37,1%. Al desagregar el desempeño por marca, se observa que marcas como Bajaj y AKT encabezan el escalafón de las más vendidas.

Precisamente, las líneas más demandadas por los colombianos son la NKD 125 y la Boxer CT 100 ES Spoke, caracterizadas por ser motos de entrada y utilitarias para diversos tipo de trabajador.

En lo corrido de 2025, las métricas del mercado dejan ver que no son las grandes ciudades las que jalonan la demanda. Por el contrario, se observa que las matrículas crecen con fuerza en municipalidades pequeñas o emergentes.

Por ejemplo, Sabaneta (Antioquia), Funza (Cundinamarca) y El Cerrito (Valle), exhiben los mayores registros de motos nuevas, con 63.345, 45.275 y 36.471, respectivamente. Les siguen: Soacha (32.675), Madrid (25.812), Mosquera (24.653), Girón (19.696), La Estrella (18.339), Villa del Rosario (18.129) y La Paz (17.552).

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Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, ha mencionado en pasadas ocasiones que “las motos son más baratas, en parte, por señales de política pública como la exención del pago de peajes y el subsidio al Soat. Además, no se ven afectadas por bloqueos en el transporte masivo. Por eso, no sorprende que, ante el abaratamiento del crédito, la demanda de motocicletas esté aumentando sustancialmente”, complementó.

Desde la óptica de Juan Carlos González, presidente de Incolmotos Yamaha, "las personas ven en las motos, una respuesta cada vez más obvia a las dificultades de movilidad en las ciudades (tiempo y costo) y en las zonas rurales donde el aumento de productividad y de oportunidades es notorio. Además, en muchos casos representan fuentes de ingreso alternativos o primarios para muchos hogares, principalmente de estratos 1, 2 y 3".

Nicolás Rendón, vicepresidente de Honda, resaltó que, en 2015, el costo promedio de una moto estaba casi en seis salarios mínimos, hoy día se puede comprar una nueva a precios que van desde cuatro salarios mínimos.

Agregó que el ejercicio que hacen muchas familias apunta a entender el costo de mantener una moto, indicador conocido como Total Cost of Ownership, TCO, allí se evalúan todos los factores: impuestos, seguros, combustible, repuestos, mantenimiento, revisión técnico-mecánica, parqueadero y movilidad; cálculo que al final arroja una relación más favorable en el caso de las motos que en el de los carros.

“Ahí entran otras variables, hoy por ejemplo es fácil acceder al crédito para financiarlas y las tasas de interés están un poco mejor frente los dos años anteriores”, añadió.