Supersalud encontró que más de 390 personas en el país se han vacunado irregularmente

La Superintendencia de Salud dio a conocer, tras una auditoría al Plan de Vacunación del Gobierno, que fueron encontradas diferentes irregularidades en la ejecución y otros hallazgos que demuestra incumplimientos en esta primera fase de inmunización contra el covid-19.

Fabio Aristizábal, superintendente de Salud, aseguró, en medio de la rueda de prensa en la que fueron revelados los resultados de la investigación, que hay 59 casos, de los cuales siete ya fueron cerrados, 12 están en seguimiento, 30 están en curso y dos ya tienen proceso administrativo.

Entre estos resalta el de la Subred del Norte de Salud del Distrito, en la que la entidad de vigilancia encontró nueve hallazgos y detectaron 395 personas que fueron vacunadas en la etapa que no les correspondía. En esto resalta la politóloga Carolina Cárdenas, persona por la cual ya se había iniciado una investigación por la vacunación irregular.

Además, se identificaron 142 personas que recibieron dosis pero no eran de la primera línea ya que trabajan en áreas administrativas como gerencias, direcciones de contratación, oficinas de participación comunitaria, gestión ambiental, dirección financiera, control interno, conmutador, entre otras.

Incluso, la Superintendencia recalcó que, algunas de estas personas de este grupo que se vacunaron irregularmente, lo hicieron una vez se inició el Plan de Vacunación el 18 de febrero, por delante de trabajadores de la primera línea de salud.

“De las personas vacunadas que no eran de primera línea, algunos de ellos, al igual que la politóloga, no tenían vinculación vigente con la Subred. Es decir, vacunaron particulares”, aseguró el superintendente.

Adicionalmente, al revisar las instalaciones dispuestas para el Plan, la Superintendencia informó que hay graves fallas en el proceso de vacunación de la Subred del Norte de Salud del Distrito, la cual integra hospitales públicos de la ciudad. Esto, debido a que no se contaba con la autoevaluación para la renovación de habilitación del servicio de vacunación, además de que está vencido desde el 25 de noviembre de 2020.

Así mismo, las instalaciones, al momento de la visita, no contaban con el personal suficiente exclusivos para la vacunación. "La subred no contaba con un protocolo que definiera el monitoreo permanente de las condiciones de almacenamiento, custodia y traslado de las vacunas, ni cuenta con contrato vigente para la calibración de los equipos. No cuenta con protocolo, ni ruta para el manejo de los eventos adversos derivados de la vacunación. Y presenta deficiencias en la calidad de la información que sustenta los datos reportados de la población vacunada", aseguró Aristizábal.