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La Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación advirtió al Invima por desabastecimiento en referencias de medicamentos
Desde hace varios meses, el sistema de salud ha experimentado una significativa crisis derivada de la insuficiencia de suministros farmacéuticos. En abril de 2024, la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación, Scare, notificó al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, acerca de la escasez de determinados anestésicos, tales como el propofol y el remifentanilo, en múltiples regiones del país.
Una vez más, el sector profesional ha instado a la implementación de medidas efectivas para abordar la situación, destacando la necesidad de establecer un comité especializado dedicado específicamente al monitoreo y seguimiento del desabastecimiento de medicamentos anestésicos. Esta iniciativa implica la creación de un organismo o la reactivación de uno previamente establecido, con el propósito de coordinar acciones y estrategias destinadas a mitigar los impactos derivados de la escasez de fármacos esenciales en el ámbito de la anestesiología.
“Los reportes a nivel nacional continúan preocupando al gremio de anestesiólogos, quienes nuevamente hacen un llamado para que se tomen medidas contundentes, entre ellas la creación o reactivación de un comité especializado para el seguimiento del desabastecimiento de medicamentos anestésicos”, puntualizó la Sociedad en su comunicado oficial.
De acuerdo con el gremio, conforme a la información proporcionada por los especialistas en anestesiología a nivel nacional, el Invima oficializó el pasado 16 de mayo la inclusión del propofol en el registro más reciente de medicamentos sujetos a seguimiento de abastecimiento y desabastecimiento, lo que implica que el Invima dará inicio a un proceso de vigilancia activa sobre la disponibilidad del fármaco, en colaboración con los titulares del registro sanitario vigente, cuya duración estimada podría extenderse entre cuatro y seis semanas.
“En cuanto al remifentanilo, el Invima indicó que el estado de este medicamento ya se encuentra en riesgo de desabastecimiento y que se adelantan los trámites en el país para mitigar esta situación, lo que incluye la posibilidad de autorización de importaciones, inclusión dentro del listado de medicamentos vitales no disponibles, entre otras medidas”, explicó el gremio.
Ante la reacción manifestada por el Invima, la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación insta a una pronta respuesta, solicitando medidas concretas que aborden la situación. Entre estas acciones se encuentra la petición de un informe exhaustivo que detalle las causas subyacentes del desabastecimiento, así como la implementación de estrategias orientadas a garantizar el suministro de estos elementos indispensables a las entidades afectadas. Además, se propone el establecimiento de un canal directo de comunicación con los proveedores de servicios de salud, con el fin de llevar a cabo un seguimiento continuo y gestionar la crisis de manera eficiente.
“Este nuevo llamado se realiza debido a que la agremiación científico gremial, continúa recibiendo reportes de desabastecimiento en departamentos como Santander, Cundinamarca, Antioquia, Nariño, Valle del Cauca, Quindío, Cesar, entre otros. Una de las situaciones más críticas se presenta actualmente en el Hospital Infantil Los Ángeles de la ciudad de Pasto, que atiende gran parte de la población infantil del sur del país. La escasez de medicamentos reportada no solo afecta la programación de cirugías, sino que también pone en riesgo la salud y la vida de la población”, concluyó la Sociedad en su comunicado.
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