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Estudio muestra que las personas son cada vez más conscientes, y que las personas que trabajan en casa ahora comen más snacks
Son varios los estudios que muestran que la pandemia, y las medidas de encierro asociadas a su contención, cambiaron los hábitos de consumo de los ciudadanos en varias esferas de su vida cotidiana. Uno de ellos es el de la alimentación, donde los resultados de la encuesta ‘State of Snacking’, desarrollada por Mondelez International y The Harris Poll, muestran que 46% de los encuestados aumentó su consumo de snacks y que seis de cada 10 personas empezó a consumirlos más por cuenta del trabajo en casa.
Partiendo de la definición de snacks como una pequeña porción de alimento que se consume entre las tres comidas principales, el estudio consultó a 6.292 adultos en todo el mundo y encontró que 57% afirma que cuando come snacks lo hace conscientemente, 66% tiene más control sobre el tamaño de las porciones y 64% es más cuidadoso con los snacks que su cuerpo necesita.
El consumo de este tipo de alimentos viene creciendo con fuerza, pues nueve de cada 10 adultos dijo consumir snacks en su día a día. De estos, 46% afirmó que el año pasado aumentó su consumo, mientras que el restante 42% señaló que mantuvo estable la cantidad que ingiere en 2020.
“Los resultados del informe evidencian la transcendencia de los snacks en la vida de la gente; su creciente relevancia económica durante el 2020, que representa un mercado de US$1,2 billones; y cómo las personas son cada vez más conscientes al elegir un snack para su bienestar. Este último es un hallazgo muy importante porque coincide con nuestro propósito de contribuir a que las personas coman bien, por eso les ofrecemos el snack correcto, para el momento adecuado y lo elaboramos de la manera correcta”, señaló Dirk Van de Put, presidente y director ejecutivo de Mondelez International.
Entre los hallazgos del estudio llama la atención que hay dos grupos que destacan entre quienes afirmaron estar consumiendo más snacks: las personas que trabajan desde casa (62%) y los millenials (56%).
“Las nuevas generaciones están buscando consumir menos azúcar, menos ultraprocesados, que sean muy naturales, poco alterados y de producción sostenible”.
“El informe evidencia la trascendencia de los snacks para la gente y cómo las personas son cada vez más conscientes al elegir un snack para su bienestar”.
Esas cifras coinciden con el comportamiento del mercado nacional pues, como explicó Camilo González, desarrollador de mercados en la compañía de snacks Moramía, hay una tendencia en la generación millenial y las que le siguen a tener hábitos de consumo más saludables.
“Las nuevas generaciones están buscando consumir menos azúcar, ultraprocesados, que sean muy naturales, poco alterados y de producción sostenible. Esto hace parte de una cultura, que se le viene inculcando a los niños, de tener un consumo sostenible y responsable con el medio ambiente”, explicó. Esto último, añadió, se ve claramente en la recepción positiva que ha tenido su esquema de venta de snacks saludables, como nueces y frutas deshidratadas, al granel.
Pero además del cambio en lo que se consume, viene cambiando también la manera en que la gente encuentra sus snacks pues estos, tradicionalmente comprados en la calle, las tiendas o los supermercados, se adquieren de forma cada vez más frecuente en canales virtuales. Así lo manifestó la mitad de los encuestados del estudio, donde además siete de cada 10 adultos señaló que planea seguir haciéndolo de esa manera incluso después de la pandemia.
Adicionalmente, llama la atención que 57% dijo que el covid-19 le abrió los ojos a nuevas formas de comprar snacks, y tres de cada 10 encuestados dijo haber descubierto nuevos productos a través de las redes sociales.
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