Desde 1992, La Organización de las Naciones Unidas (ONU) decretó que el 22 de marzo debía ser celebrado como el Día Mundial del Agua. El evento conmemorativo este año se realizará en Roma, coordinado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
El tema principal a tratar será 'El agua y la seguridad alimentaria', con presencia de expertos en este asunto y la esperada presentación del Cuarto Reporte sobre el Desarrollo Mundial del Agua (WWDR4).
Según reporta la ONU, las 7 mil millones de personas viven actualmente beben entre 2 y 4 litros de agua cada día.
No obstante, la mayoría de agua que consumimos no se relaciona directamente con lo que bebemos, sino con la producción de alimentos. Producir un kilo de carne vacuna consume, aproximadamente, 15.000 litros de agua, y un kilo de trigo requiere 1.500 litros.
Ahora bien, en el informe WWDR4 encontramos datos que son aún más dicientes sobre la situación actual de la utilización del agua. En general, la agricultura es el principal consumidor de agua entre todos los sectores productivos. Casi el 20% del total de 7,130 kilómetros cúbicos de agua que se gastan anualmente en agricultura es 'agua azul', es decir, agua de los ríos, fuentes, lagos y agua subterránea. Las áreas dotadas con irrigación, que tienen una importante incidencia en este consumo, pasaron de 170 millones de acres en 1970 a 304 millones en 2008. Especialmente en los países menos desarrollados, el agua ya es un recurso limitado y esto puede incrementar aún más el efecto devastador.
Las cifras sobre el posible aumento de la demanda de alimentos también son altamente chocantes. La demanda de alimentos para 2030 se predice que será 50% más alta que en la actualidad. Esto, por supuesto, incrementaría la necesidad de utilizar agua en la agricultura, de no ser que la dieta media cambie. Asimismo, la utilización de energía hídrica también se incrementaría en un 60%. Para 2050, el consumo de agua para la agricultura crecería en un 19%, es decir, a 8.515 kilómetros cuadrados.
Infortunadamente, uno de los principales problemas de la utilización del agua en la agricultura es la mala utilización de productos alimenticios que, a pesar de ser cultivados, no son consumidos. Las cadenas de distribución incrementa los precios, y esto pude llevar a que no sea posible que los consumidoresmedio tengan acceso a ellos y puedan consumirlos.
La ONU realiza ciertas recomendaciones que permitirían mejorar esta desafortunada situación, la cual se agrava por la creciente población mundial (que se calcula será de 9 mil millones en 2050), y la cada vez más escasa cantidad de agua consumible: 1) Seguir una dieta más sana y sostenible. 2) Consumir menos productos que necesiten un uso intensivo del agua. 3) Reducir el desperdicio de comida, que llega a un sorprendente 30% que nunca se consume, y 4) producir más comida, de mejor calidad, con menos agua.
Adicionalmente, a mediados del presente mes, se realizó en Marsella, el VI Foro Mundial del Agua, con participación de 140 países. El lema del encuentro fue 'Soluciones innovadoras por el Agua'.
No obstante, la conclusión primordial de la ONU es que el verdadero cambio con respecto a la utilización de agua debe ser una transformación de las rutinas que cada uno de nosotros tiene. Crear esta conciencia es la labor del Día del Agua.
Algunas cifras del informe WWDR4 de la ONU
El Cuarto Reporte sobre el Desarrollo Mundial del Agua (WWDR4) asegura que 70% del agua potable es utilizada en regadíos, cifra que llega al 90% en algunas economías emergentes. Adicionalmente, el crecimiento de la población mundial, que se ha proyectado en 2 o 3 mil millones de personas en los siguientes 40 años, significará un aumento en la demanda de alimentos de un 70% para 2050.
