Cada año las organizaciones son más conscientes de la importancia del rol de las mujeres en su interior. Las empresas están entendiendo que hacer esfuerzos a efectos de ofrecer igualdad de oportunidades a hombres y mujeres en el entorno laboral se traduce en innovación y rentabilidad.
En un estudio reciente realizado por la organización estadounidense Catalyst, el centro de pensamiento más importante de género y empresa en el mundo, se concluye que las empresas que cuentan con mayor participación de mujeres en sus equipos de alta dirección, obtienen mejores resultados financieros que aquellas cuyos equipos gerenciales son totalmente masculinos. En ese mismo sentido en un estudio realizado por el Instituto Petersen de Economía, develó que a partir de 30% de mujeres en posiciones de liderazgo, comienza a aumentar la rentabilidad de las empresas desde un 15% hasta un 26%.
En un conjunto de 44 naciones estudiadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), Colombia ocupa el tercer lugar en mayor participación femenina en cargos directivos, cerca de 45%, superada por poco por Letonia y Estados Unidos. Si bien Colombia, se posiciona en un buen lugar en ese primer indicador, la misma investigación da cuenta de que la participación femenina en la fuerza laboral en Colombia está entre las más bajas, ocupando el puesto 41. A nivel global, la investigación también concluye que las mujeres siguen ganando menos que los hombres.
Sin embargo, en educación se viene logrando un gran progreso. Según cifras del Ministerio de Educación, en los últimos 10 años las mujeres han representado 54,1% del total de graduados del país, tanto de las universidades como de las instituciones técnicas, esto es debido a que los hombres presentan una tasa más alta de deserción.
En la equidad de género a nivel corporativo es fundamental establecer mecanismos que permitan identificar los estilos de liderazgo femenino en los diferentes escenarios de la organización. Para 3M, la diversidad de género forma parte de la filosofía de la compañía, y hoy en día 60% del comité ejecutivo de Colombia está conformado por mujeres. Adicionalmente, el porcentaje de mujeres y hombres empleados es equitativo y trabajamos para ofrecer oportunidades a hombres y mujeres en todas las áreas y en todos los niveles de la organización. Las habilidades, experiencias y capacidades diferentes de los colaboradores es lo que impulsa a la empresa hacia adelante y la mantiene relevante hacia los clientes y mercados.
Trabajar en programas que garanticen la equidad de género es fomentar la inclusión y la diversidad, y es enriquecer la organización con multiplicidad de experiencias, fortalezas, habilidades, competencias y perspectivas.
Avanzar en igualdad de género constituye una oportunidad importante para contribuir al desarrollo sostenible en Colombia. Es fundamental que el Estado, el sector privado y la sociedad en general, unan esfuerzos para avanzar en este campo de acción. La igualdad de género debe ser un tema prioritario, pues es un factor imprescindible que genera mayor productividad, rentabilidad, competitividad e innovación en las organizaciones.
