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El informe The Sustainability Yearbook evidencia que 16 de las 7.554 compañías más sostenibles en el año 2022 son colombianas
Los proyectos de impacto ambiental y social han tomado relevancia durante los últimos años, sobre todo cuando el mundo está en recuperación tras el impacto de la pandemia que afectó los diferentes modelos de negocio.
La reinvención fue una bandera de estos años y los inversionistas, empresarios y expertos han puesto la atención sobre modelos de negocio que generen un impacto significativo en el factor social y de medio ambiente.
Según explica Juan Carlos Lozano, director y fundador en Innpactia, una plataforma que conecta proyectos de alto impacto con oportunidades de financiamiento, "los inversionistas están poniendo más atención a los reportes y mediciones del impacto, al punto que cerca de 80% de ellos consideran que los factores ambientales, sociales y gubernamentales son centrales para la toma de decisiones financieras".
La clave está en "crear nuevos mecanismos para aumentar los recursos financieros que buscan la generación de impacto como nuevos empleos y encadenamientos productivos inclusivos para el crecimiento y desarrollo del país, más aún reconociendo que Colombia tiene personas con experiencia en temas de medición de impacto, de gestión de proyectos, recursos y personal técnicamente apropiado para la ejecución de los proyectos”.
En el informe The Sustainability Yearbook, 16 de las 7.554 compañías más sostenibles en el año 2022 son colombianas. Si se comparan estos datos con 2021, entraron dos nombres nuevos. Además, más de 90% de las empresas del país hacen reportes anuales de sostenibilidad para gestionar y optimizar el proceso y manejo de residuos postconsumo.
"En Colombia, se vienen dando concentraciones de distintas fuentes que brindan un panorama único en el hemisferio: grandes flujos de cooperación internacional, inversión pública sostenida, maduración de la filantropía catalítica y crecimiento de la inversión e innovación financiera en temas de impacto. Asimismo, fue el primer país del mundo en desarrollo en emitir un Bono de Impacto Social, y tiene ya tres instrumentos que le siguieron a este", resaltó Lozano.
El informe de Innpactia resalta que actualmente, teniendo en cuenta el desarrollo de Colombia y el cambio de pensamiento hacia el enfoque de impacto, las compañías deben reforzar el trabajo en frentes relacionados con desafíos ambientales. Por ejemplo, la transición energética, el Acuerdo de Escazú y la deforestación de la Amazonía.
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