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El restaurante Tierra, ubicado en la Zona T de Bogotá, ofrece un menú con elementos del campo colombiano y una apuesta gastronómica que se basa en la comida nikkei, orientada a la alta cocina
Como parte de las joyas gastronómicas de la zona T de Bogotá, se encuentra Tierra, un restaurante que maneja productos locales resaltando las técnicas de la comida nikkei. Por esta razón, elementos típicos de los platos colombianos, como el plátano o el maíz, son sabores estrella del lugar.
El restaurante está ambientado para hacerle honor a su nombre, pues la decoración en tonos tierra y muebles, principalmente en madera, dan sofisticación y sobriedad al entorno. Además, como parte de la experiencia, la comida es servida al centro de la mesa para que los platos sean compartidos.
La variedad de platos brilla por sí sola. Una de las recomendaciones, es comenzar con entradas como el pan a base de maíz acompañado de maní, maíz crocante que viene junto a una mantequilla de ají amarillo y panca.
Luego de ello, puede disfrutar de una entrada un poco más característica del lugar que se trata de los ceviches. El criollo peruano, por ejemplo, tiene de base leche de tigre de ají amarillo ligeramente picante que se acompaña de mazorcas baby, aguacate, camote, maíz, mora e incluso hormigas culonas que aportan un toque crocante al plato y un contraste de sabores.
Otro imperdible del lugar es el frenesí de maíz, que es una arepa de chóclo recién hecha en cremoso de suero costeño y queso paipa, con crocantes de maíz y jalapeños encurtidos en panela. Y como si no fuera una explosión de sabores por sí sola, es ahumada en hoja de plátano. Seguido a esto, llega el momento de los platos fuertes. Uno de los más recomendados, son las chaufas, es decir, los arroces chinos como el de panceta y camarón y al que se suman otras opciones que incluyen un plato vegetariano.
La coctelería es una experiencia única en el lugar, pues estas bebidas son a base de un licor artesanal de frutas que surge de una destilación de chicha realizada en el mismo restaurante. Algunos de los cocteles de la carta incluyen toques en hoja de coca como parte de una propuesta de reivindicación de esta planta y sus diferentes usos en culinaria.
Esta entrada, que se recomienda para antes del plato fuerte, consta de una arepa de chóclo en cremoso de suero costeño y queso paipa, con crocantes de maíz y jalapeños encurtidos en panela y ahumada en hoja de plátano.
Es un cóctel a base de licor de mora artesanal, la cual se agrega en almíbar y contrasta con el ácido del limón y naranja. Viene con una hoja de coca como reivindicación, y suele ser perfecto para acompañar con cada plato.
Los títulos elegidos incluyen obras de autores reconocidos, así como nuevas voces que aportan perspectivas frescas y diferentes