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Pop Mart, fabricante de Labubu
Se alega que la tienda ofrecía versiones falsas de los coleccionables con orejas de conejo, también conocidos como Lafufu, y que no conectaba sus cajeros automáticos al registro fiscal
Los funcionarios de aduanas austriacos han allanado una tienda temporal de Labubu en el centro de Viena, sospechando que sus propietarios evaden impuestos y venden versiones falsificadas de los promocionados muñecos de peluche.
Se alega que la tienda ofrecía versiones falsas de los coleccionables con orejas de conejo, también conocidos como Lafufu, y que no conectaba sus cajeros automáticos al registro fiscal, según informó el Ministerio de Finanzas de Austria en un comunicado. Las ventas en agosto ascendieron a US$50.120.
El único vendedor de la tienda en el momento del asalto policial carecía de permiso de trabajo y estaba registrado como trabajador de bajos ingresos, una categoría que se suele utilizar para empleados a tiempo parcial con un salario inferior a un tercio del salario mínimo. La tienda temporal se enfrenta a multas de hasta US$21.000, según el comunicado.
Los juguetes chinos se han convertido en un fenómeno en redes sociales, y las nuevas series suelen agotarse en cuestión de minutos. Los Labubus suelen tener un precio de reventa superior al precio de venta oficial, que parte de unos US$16 en Austria.
Las acciones de su productor, Pop Mart International Group Ltd., han subido 251% este año, llevando su valor de mercado total a US$46.000 millones.
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