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Tras las publicación del IPC estadounidense, el Dow Jones ha subido 0,11%, el S&P 500 opera plano y el Nasdaq 100 ha caído 0,25%.
Los agentes del mercado bursátil ajustaban sus posiciones este jueves tras conocer el reporte de inflación de diciembre en Estados Unidos, que si bien se ajustó a las perspectivas de desaceleración de precios, vino acompañado con un reporte que indica rigidez en el mercado de trabajo y las consecuentes presiones sobre la Reserva Federal.
En una volátil reacción, los futuros del Dow Jones subían 0,11%, los del S&P 500 operaban planos y los del Nasdaq 100 perdían 0,25%. La bolsa estadounidense cerró ayer con ganancias, motivada por las expectativas en torno al IPC.
En Europa, el regional Euro Stoxx 50 crecía 0,34% y el Ftse 100 de Londres ganaba 0,64%.
Tal como anticiparon las estimaciones de consenso, el IPC de diciembre arrojó una variación anual de 6,5%, menor al 7,1% de noviembre y anotando un sexto mes consecutivo a la baja.
El IPC subyacente -que excluye alimentos y energía, componentes más volátiles- tuvo un cambio anual de 5,7%, tres décimas menor que en el mes previo y una tercera caída del indicador.
El dato estuvo acompañado por un informe de peticiones de subsidios por desempleo en EE.UU. que se ubicó por debajo de las expectativas, aportando indicios de que la rigidez del mercado laboral se mantiene, lo que entrega a la Fed el imperativo y la confianza de endurecer las condiciones financieras.
Los operadores del mercado estiman que la Reserva Federal estaría cerca de llegar al fin de su ciclo contractivo de política monetaria. La tasa de fondos federales se encuentra actualmente en 4,50%.
Jornada asiática
Al cierre de las bolsas asiáticas, el Nikkei 225 de Tokio no tuvo cambios, el Hang Seng de Hong Kong creció 0,36% y el CSI 300 de China continental subió 0,20%.
El rendimiento del bono japonés a 10 años subió levemente a 0,50% en el máximo permitido por el Banco de Japón (BoJ, sigla en inglés) tras su mediático ajuste de diciembre, mientras el yen se disparaba 1,35%.
De acuerdo al periódico Yomiuri, el BoJ revisaría los efectos secundarios de su política ultraexpansiva en la reunión de política que tendrá lugar el 17 y 18 de enero, lo que volvió a activar las apuestas a una normalización monetaria del banco central japonés.
En China, el IPC de diciembre se ajustó a los pronósticos con una variación anual de 1,8%. Por otro lado, los precios al productor cayeron más de lo esperado a -0,7% anual, mostrando una deflación por tercer mes consecutivo.
"La inflación de China cierra ampliamente por debajo otras economías comparables y reflejando el impacto de las medidas de restricción sanitaria. En el margen se advierte un ligero repunte, marcado por alzas en alimentos", señaló Bci Estudios en su informe diario.
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