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El ejército israelí ordenó a todos los civiles que viven en la ciudad de Gaza que se trasladaran a la zona al sur de Wadi Gaza.
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La intensificación del conflicto tendrá repercusiones en el crecimiento de la economía mundial, el precio del petróleo y la inflación
La posibilidad de que la guerra entre Israel y Hamás escale a una crisis en el Medio Oriente con repercusión en la economía global está cada vez más latente. Uno de los primeros coletazos es el incremento en los precios del petróleo, esta semana, por ejemplo, el Brent subió cerca de 6% desde febrero y los analistas consideran que un recrudecimiento podría elevar el precio del barril a US$150, según Bloomberg Economics.
¿Cuáles son los escenarios para que este escalamiento impacte la economía global? La operación militar de Israel en Gaza, un presunto respaldo de Irán a Hezbollah, un ataque directo de Irán a Israel, la participación de terceros como Siria y Líbano, y un alargue del conflicto, según los expertos, tendrá la repercusión ya vista en los precios del petróleo, que a su vez añadiría 0,2 puntos porcentuales a la inflación mundial, manteniéndola en cerca de 6% y reforzando la presión de los banqueros centrales para que mantengan su política monetaria restrictiva, incluso cuando el crecimiento decepcione.
La tensión en Medio Oriente ya ha permeado a los países árabes donde se han llevado a cabo jornadas de manifestación en contra del conflicto, pero también en apoyo a cada bando.
Las fuerzas israelíes adelantan operaciones militares en Gaza. Autoridades dicen que es para rescatar rehenes y seguir debilitando las estructuras de Hamás. El Estado Judío advirtió el viernes a los residentes en Gaza que debían irse de la ciudad en menos de 24 horas. ONU dijo que evacuación era “misión imposible”.
“Un alargamiento del conflicto aumentará la volatilidad de las materias primas y por ende generará incertidumbre en el comportamiento de la inflación”.
“Si Irán da la orden de que Hezbollah, grupo terrorista que opera desde Líbano, ataque a Israel,se daría un conflicto mayor con consecuencias para este último”.
Otro punto clave es que Medio Oriente es un proveedor crucial de energía y un paso importante para el transporte marítimo. Entre uno de los escenarios posibles está que la guerra se libre solamente en Gaza, de ser así, los analistas de Bloomberg estiman que el precio en el barril de petróleo aumente hasta US$4. Otro de los escenarios posibles es que el conflicto salga de esa zona y se vean involucrados Siria y Líbano, este último por medio de las milicias de Hezbollah, grupo armado apoyado por Irán. De ser así, sería una guerra regional en la que Irán se confronte indirectamente con el Estado Judío. En este caso, se vería una mayor subida en los precios del petróleo a cerca de US$8 y esto desaceleraría el crecimiento de la economía repercutiendo en un incremento del PIB de -0,3% y un aumento en la inflación de +0,2%. Pero esta guerra de poderes también podría evolucionar a un conflicto directo entre Irán e Israel.
Este último escenario en materia de desarrollo de conflicto tendría más impacto. El barril de petróleo podría subir, según Bloomberg Economics US$64, la inflación mundial subiría 1,2% y la estimación de crecimiento de PIB bajaría 1%.
Marcos Peckel, director de la comunidad judía en Colombia, asegura que gran parte de la responsabilidad de que este conflicto crezca está en manos de Irán. “Si este país da la orden de que Hezbollah, grupo terrorista que opera desde Líbano, ataque a Israel. Se daría un conflicto con mayores consecuencias para Irán”, dice. En ese sentido, considera que este es el factor principal para que este conflicto pase a otro nivel. Otro de los escenarios a tener en cuenta es que este aumento de las hostilidades de Hezbollah tendría repercusiones contra el Líbano, teniendo en cuenta que es desde este país donde opera.
El analista económico internacional y docente de la Universidad del Norte, Mario de la Puente, reconoce que este conflicto está generando un escenario económico inestable. Ya se ha visto reflejado en el incremento de los precios del petróleo. También en los mercados financieros. Para tener en cuenta, solo esta semana el índice bursátil de referencia de Israel ha caído 6,4%.
La alteración del comercio global, según el analista también es un severo impacto del escalonamiento. Ya esto lo había advertido la directora de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, al señalar que el conflicto generaba incertidumbre y amenazaba el crecimiento económico mundial.
De la Puente concluye que un alargue de los enfrentamientos aumentará la volatilidad de las materias primas y por ende la incertidumbre, lo que se ve reflejado en el comportamiento de la inflación.
El conflicto podría extenderse a países vecinos como Líbano y Siria, que albergan poderosas milicias respaldadas por Teherán, convirtiéndolo en una guerra de poder de Israel e Irán.
Una escalada de un conflicto directo con Irán podría llevar a la economía global a una recesión. El crecimiento mundial caerá a 1,7%, con bajas de US$1 billón para 2024.
Precios subieron 6% al cierre de viernes. Si el conflicto escala, por ejemplo, si Irán decide cerrar el Estrecho de Ormuz, podría subir hasta 10% y elevar el precio del crudo a US$150.
La guerra regional es más latente: Arabia Saudí suspendió diálogos de paz con Israel. Si el crudo sigue al alza, podría añadir 0,2 puntos porcentuales a la inflación mundial.
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