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EE.UU.

Esto es lo que ocurre cuando el Gobierno de Estados Unidos cierra todas sus puertas

sábado, 27 de septiembre de 2025

Bandera de Estados Unidos

Foto: Reuters

Todos los cierres del Gobierno tienen la misma causa: el Congreso no aprueba nuevos gastos cuando expiran los proyectos de ley de gastos anteriores

Bloomberg

Los cierres del Gobierno estadounidense se han vuelto tan comunes en las últimas décadas que todas las agencias federales cuentan con un manual sobre cómo implementarlos. Sin embargo, la administración Trump está reescribiendo rápidamente esos planes antes del final del año fiscal el próximo martes, lo que hace que un posible cierre sea aún más impredecible —y potencialmente disruptivo— que cualquier otro que se recuerde.

Todos los cierres del Gobierno tienen la misma causa: el Congreso no aprueba nuevos gastos cuando expiran los proyectos de ley de gastos anteriores. Pero su impacto puede variar en función del momento, la duración y las peculiaridades del proceso presupuestario, que puede hacer que haya dinero disponible para algunas agencias pero no para otras.

El cierre de la próxima semana probablemente será más grave que la mayoría. Sería el primero desde la administración Obama que comenzaría en un año fiscal, trimestre o mes. El Congreso no ha aprobado ninguno de los 12 proyectos de ley de asignaciones que financian agencias específicas.

Y el presidente Donald Trump está aumentando la presión al amenazar con despedir permanentemente, en lugar de suspender temporalmente, a los trabajadores federales no esenciales cuyos puestos no cuentan con financiación.

Aumentando la incertidumbre: La Oficina de Gestión y Presupuesto de la Casa Blanca ordenó el miércoles a las agencias que revisaran sus planes de contingencia para especificar qué trabajadores serán despedidos durante el cierre. Las agencias afirman que no pueden publicar esos planes hasta que la OMB los apruebe, y hasta el sábado por la mañana los detalles eran escasos.

Permanecer abiertos

Por ley, las actividades esenciales para proteger la vida y la propiedad continúan. Entre ellas se incluyen las operaciones militares, la aplicación de la ley y las inspecciones alimentarias.

El presidente debe seguir desempeñando sus responsabilidades constitucionales. Por lo tanto, gran parte de la Casa Blanca, la Oficina del Abogado del Indulto y el Representante Comercial de los Estados Unidos permanecen abiertos. Los altos funcionarios federales confirmados por el Senado siempre están exentos de la suspensión temporal, pero podrían quedarse sin personal. Los miembros del Congreso también deben recibir su salario en virtud de la 27.ª Enmienda de la Constitución.

Además, varias entidades, entre ellas la Reserva Federal y la Oficina de Protección Financiera del Consumidor, no se financian con asignaciones anuales del Congreso y pueden seguir funcionando con sus propias fuentes de financiación.

Las empresas propiedad del Gobierno o patrocinadas por él, como Amtrak, el Servicio Postal de los Estados Unidos, Fannie Mae y Freddie Mac, cuentan con fuentes de financiación que no dependen de las asignaciones anuales del Congreso y seguirán funcionando.

Empleados federales

En cierres anteriores, aproximadamente cuatro de cada diez empleados federales fueron suspendidos y se les prohibió realizar cualquier trabajo en virtud de una ley que prohíbe a las agencias aceptar trabajo voluntario.

Los seis restantes de cada diez deben seguir trabajando como empleados esenciales.

Más información: La amenaza de Trump de despidos masivos pone en riesgo daños duraderos por el cierre.

En cualquier caso, los empleados federales no cobrarán, al menos durante el cierre. La Ley de Trato Justo a los Empleados del Gobierno de 2019 codificó una práctica de larga data de pagar a los empleados federales de forma retroactiva una vez finalizado el cierre, independientemente de si trabajaron o no.

Viajes y transporte

La Administración Federal de Aviación y la Administración de Seguridad en el Transporte proporcionan funciones de seguridad esenciales y continuarían haciéndolo. Sin embargo, los viajeros podrían seguir sufriendo retrasos: los controladores aéreos y los agentes de la TSA no cobrarían, lo que ha provocado un aumento de las ausencias durante los cierres anteriores.

Los consulados y las oficinas de pasaportes de EE. UU. pueden funcionar siempre que dependan de los ingresos procedentes de las tasas.

Seguridad Social, asistencia sanitaria

Las prestaciones de Medicare continuarían, al igual que los cheques nuevos y continuos de la Seguridad Social. Sin embargo, algunas medidas administrativas, como la verificación de prestaciones, las correcciones de los registros de ingresos y la sustitución de tarjetas, se han retrasado en cierres anteriores.

Además, la Oficina de Estadísticas Laborales afirma que cualquier retraso en su informe sobre la inflación de octubre afectaría al cálculo de los aumentos anuales del coste de la vida para los beneficiarios de la Seguridad Social.

El hospital de los Institutos Nacionales de Salud en Bethesda, Maryland, permanecería abierto para atender a los pacientes actuales, y las actividades de investigación continuarían cuando su cierre pudiera interrumpir los ensayos clínicos en curso.

 

Los programas de asistencia alimentaria de la red de seguridad han continuado en cierres anteriores, pero podrían tener una menor prioridad para la administración Trump.

Es probable que la atención médica en los hospitales y clínicas para veteranos continúe, al igual que los programas de prevención del suicidio, la investigación médica y protésica y las prestaciones funerarias.

Sin embargo, otras prestaciones para los veteranos podrían retrasarse, como las destinadas a la educación, la formación profesional y los préstamos.

Parques y museos

Es probable que la mayoría de los parques nacionales cierren sus puertas, lo que ahuyentaría a los visitantes y afectaría a las empresas del sector de las actividades recreativas al aire libre, cuya economía asciende a un billón de dólares. Durante algunos cierres anteriores, los parques se cerraron por completo, pero en 2018 el Servicio de Parques Nacionales dejó abiertos algunos sitios de fácil acceso, aunque con baños sin limpiar y más basura.

Los museos, incluidos el Smithsonian y la Galería Nacional de Arte, podrían cerrar en caso de un cierre prolongado.

Los cementerios, monumentos y centros de visitantes de todo el mundo que dependen de la Comisión Americana de Monumentos de Batalla también cerrarían probablemente.

Defensa nacional

El personal uniformado está exento de los permisos sin sueldo y seguiría acudiendo al trabajo sin cobrar. La mayoría de los empleados civiles del Departamento de Defensa serían inicialmente objeto de permisos sin sueldo.

El Pentágono podría continuar con muchas actividades de contratación para apoyar a los miembros del servicio en virtud de una ley de la época de la Guerra Civil llamada Ley de Alimentación y Forraje. Los entierros y las visitas al Cementerio Nacional de Arlington continuarían.

Las agencias de espionaje dan pocos detalles sobre cómo se verían afectadas, pero la Oficina del Director de Inteligencia Nacional ha proporcionado anteriormente orientación a los empleados indicando que no están automáticamente exentos del cierre.

Datos laborales y económicos

Entre las agencias del Departamento de Trabajo que probablemente cerrarían por completo se encuentra la Oficina de Estadísticas Laborales, según un plan de contingencia de marzo de 2025 publicado en virtud de la Ley de Libertad de Información. Un cierre probablemente retrasaría la publicación del informe de empleo de septiembre, previsto para el próximo viernes, y, si continúa, el informe sobre la inflación previsto para mediados de mes.

No se trata solo de la publicación de datos. La recopilación de datos también se detendría, lo que afectaría a la calidad de los datos durante los próximos meses, dejando a la Reserva Federal sin datos fiables que le ayuden a trazar la trayectoria de los tipos de interés. Los responsables políticos y los inversores que dependen de los datos tendrían que recurrir a terceros para completar la información sobre la salud de la economía.

Las funciones relacionadas con la salud y la seguridad del Departamento de Trabajo, como las inspecciones de los lugares de trabajo por parte de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional, continuarían. Muchos programas de prestaciones tampoco se verían interrumpidos, ya que cuentan con asignaciones permanentes, incluidas las prestaciones por neumoconiosis.

Departamento del Tesoro

En cierres anteriores, el Departamento del Tesoro continuó con los préstamos y el servicio de la deuda del Gobierno, la labor normativa y otras cuestiones necesarias para cumplir con las facultades constitucionales del presidente.

Servicio de Impuestos Internos

Durante un cierre, el IRS deja de responder a las llamadas a las docenas de líneas de atención al cliente que opera. La mayor parte de la administración tributaria se detendría.

Un cierre no pospone la retención de impuestos ni los plazos para los pagos estimados de impuestos adeudados.

Agencias reguladoras

La administración Trump ha reforzado su control sobre las agencias reguladoras independientes, pero los planes de cierre anteriores exigían que la Comisión Federal de Comercio detuviera la mayor parte de su actividad investigadora.

La Comisión de Bolsa y Valores no revisa ni aprueba los registros de asesores de inversión, corredores de bolsa, agentes de transferencia, organizaciones de calificación, empresas de inversión y asesores municipales.

La Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas se ha basado en un dictamen jurídico de 1995 según el cual sus funciones de supervisión del mercado son esenciales para evitar «perturbaciones y pérdidas masivas en la economía privada, así como trastornos en muchos aspectos de la sociedad y de la actividad privada en general, que producirían un sufrimiento y unas pérdidas incalculables».

La Comisión de Seguridad de Productos de Consumo aún podría emitir retiradas del mercado cuando exista «una amenaza inminente para la seguridad de la vida humana», pero se suspendería la supervisión más rutinaria.

Energía y medio ambiente

El Departamento del Interior puede expedir algunos permisos para la perforación de petróleo y gas en alta mar, pero estos podrían depender de factores como la seguridad y los intereses patrimoniales del Gobierno en el pozo.

La Agencia de Protección Ambiental puede continuar con algunos programas y actividades con otras fuentes de financiación, como la limpieza de los emplazamientos Superfund.

La Administración de Información Energética, que ya se enfrenta a retrasos en la presentación de informes debido a los recortes de personal, probablemente cerraría.

La Comisión Reguladora Nuclear dejaría de realizar actividades de concesión de licencias, certificación y permisos e inspección, así como ejercicios de preparación para emergencias. La Administración Nacional de Seguridad Nuclear se centraría en el mantenimiento y la protección de las armas nucleares y los reactores navales desplegados.

Vivienda

Los programas hipotecarios administrados por la Administración Federal de Vivienda y Ginnie Mae han continuado en cierres anteriores. Muchas subvenciones en bloque para vivienda y desarrollo urbano ya se han comprometido con los estados y no se han interrumpido.

Las viviendas subvencionadas, incluidas las viviendas públicas y los vales de elección de vivienda de la Sección 8, no dependen de los proyectos de ley de gastos anuales, pero siguen corriendo el riesgo de quedarse sin fondos. Según el plan de contingencia público más reciente, «casi todo» el trabajo relacionado con la vivienda justa se detendría.

Pequeñas empresas

La disponibilidad de préstamos dependería de cómo se financien. Muchos programas de ayuda en caso de catástrofes continuarían, mientras que las solicitudes de préstamos más tradicionales se retrasarían. Los programas de apoyo a las empresas propiedad de veteranos, las exportaciones y la tutoría también cesarían.

La mayoría de los trabajadores de ayuda de emergencia de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias permanecerían en sus puestos.

Tribunales federales

La Corte Suprema, que inicia su nuevo período el 6 de octubre, continuaría con sus operaciones normales en caso de un lapso a corto plazo, dijo la portavoz de la Corte Suprema, Patricia McCabe.

En el pasado, los tribunales inferiores han recurrido a otros fondos disponibles que no están sujetos al proceso de asignaciones anuales, pero esos fondos podrían agotarse.

Reserva Federal

Las operaciones de la Reserva Federal no se verían afectadas, lo que significa que el banco central podría seguir ajustando los tipos de interés, regulando los bancos y realizando investigaciones económicas. La CFPB, que está financiada por la Reserva Federal, también podría permanecer abierta, pero ha reducido considerablemente sus actividades bajo el mandato de Trump.

Congreso

Aunque la autoridad del Congreso para financiarse a sí mismo también se agotaría, también tiene que funcionar para poder poner fin al cierre.

Sin embargo, es probable que otras agencias que dependen del Congreso, como la Biblioteca del Congreso y el Jardín Botánico de Estados Unidos, cierren sus puertas a los visitantes.

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