Biden presiona a perforadoras de Estados Unidos para que aumenten la producción

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que su plan de liberar un millón de barriles de petróleo por día de las reservas estadounidenses durante seis meses sentaría las bases para que el país logre la independencia de los proveedores de energía extranjeros.

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Biden culpó al presidente ruso, Vladímir Putin, y a la invasión rusa a Ucrania, por el aumento en los precios de la gasolina de este año, llamándolo “el aumento de precios de Putin”. Pero también criticó a las compañías petroleras estadounidenses que se han mostrado reacias a aumentar la producción, y pidió al Congreso que multe a las empresas que tienen contratos de arrendamiento de perforación no utilizados en tierras federales.

“Las empresas tienen una obligación que va más allá de los accionistas: con sus clientes, sus comunidades y su país”, dijo Biden este jueves luego de que la Casa Blanca anunciara el retiro más grande de la Reserva Estratégica de Petróleo. “Ninguna empresa estadounidense debería aprovechar una pandemia o a Vladímir Putin para enriquecerse a expensas de las familias estadounidenses”.

Biden promocionó un plan separado para proporcionar más de US$3.000 millones a los estados para ayudar a los propietarios a climatizar sus hogares. También invocará los poderes de la Guerra Fría para fomentar la producción nacional de minerales críticos para baterías para vehículos eléctricos y otros usos. Los materiales para las baterías se unirán a la lista de artículos cubiertos por la Ley de Producción de Defensa de 1950.

“Es hora de brindar una independencia energética real a largo plazo a EE.UU. de una vez por todas”, dijo Biden. “No es momento de hacer política”.

Biden dijo que espera que los aliados acuerden liberar entre 30 y 50 millones de barriles más de petróleo de sus propias reservas.

Es posible que se liberen hasta 180 millones de barriles de las reservas en los próximos meses, una cantidad que la Casa Blanca y los analistas del mercado petróleo calificaron de sin precedentes. La medida evidencia la preocupación de parte de la Administración Biden por el aumento de los precios de la gasolina y la escasez de suministro tras la invasión rusa a Ucrania.

Los altos precios de los combustibles están pesando mucho sobre las perspectivas políticas de la Casa Blanca en noviembre, cuando los votantes decidirán si el partido de Biden conserva el control del Congreso. El presidente ha luchado por controlar tanto los precios de la gasolina como la inflación en general, que se encuentra en máximos de 40 años, a medida que la economía mundial se ajusta a las interrupciones de la pandemia.

Contrario a las garantías de la Administración el año pasado de que los precios de la gasolina caerían en 2022, estas han aumentado drásticamente. La Casa Blanca ha atribuido el aumento a la invasión rusa de Ucrania, señalando en su comunicado que los precios de la gasolina han subido casi un dólar por galón desde principios de año.