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Las medidas, incluida una garantía de préstamo de US$15.000 millones a la empresa de servicios públicos de California PG&E Corp.
La administración Biden ha distribuido al menos US$27.600 millones en financiación a empresas de energía limpia en sus últimos días antes de que el presidente electo Donald Trump asuma el cargo.
Las medidas, incluida una garantía de préstamo de US$15.000 millones a la empresa de servicios públicos de California PG&E Corp. para una serie de proyectos de energía limpia anunciados el viernes, marcan los últimos esfuerzos del presidente Joe Biden por asegurar su legado climático antes de que Trump tome el mando, con la promesa de rescindir los fondos verdes no utilizados. El gobierno de Biden también finalizó el viernes un préstamo de US$1.000 millones para la mina de litio Rhyolite Ridge de Ioneer Ltd. en Nevada y cerró una garantía de préstamo de casi US$600 millones para un proyecto solar de Puerto Rico de Convergent Energy and Power Inc.
Otros acuerdos finalizados por la Oficina de Programas de Préstamos del Departamento de Energía en el último mes incluyen un préstamo de US$6.600 millones a Rivian Automotive Inc., una garantía de préstamo de casi US$1.700 millones para el productor de hidrógeno Plug Power Inc. y 1.670 millones de dólares para el fabricante de biocombustibles Calumet Inc.
“El ritmo de los anuncios no tiene precedentes”, dijo Kennedy Nickerson, quien anteriormente trabajó como asesor de políticas en la Oficina de Programas de Préstamos. “Realmente demuestra la incertidumbre en torno a cómo la administración Trump va a operar el programa”.
El programa de préstamos del Departamento de Energía, que se convirtió en un banco verde de US$400.000 millones gracias a una inyección de la Ley de Reducción de la Inflación de Biden, ha sido una herramienta poderosa para combatir el cambio climático y ayudar a comercializar tecnologías verdes emergentes. En total, dijo el departamento el viernes, el programa había cerrado más de US$60.000 millones en financiación para 25 proyectos durante los cuatro años de mandato de Biden.
A pesar del mandato de financiar tecnologías intrínsecamente más riesgosas, la tasa de pérdidas de préstamos del programa está a la par de la de las principales instituciones financieras y ha generado miles de millones de dólares en pagos de intereses para el gobierno.
Pero el programa ha sido criticado por los republicanos en el Congreso y enfrenta un futuro incierto bajo el gobierno de Trump, quien pidió al Congreso durante su primer gobierno que eliminara el programa. Esta vez, algunos en el círculo íntimo de Trump quieren deshacerse de la Oficina de Programas de Préstamos o reestructurarla para financiar combustibles fósiles y otras fuentes de energía favorecidas por los republicanos.
Uno de los dos líderes elegidos por Trump para dirigir el llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental, Vivek Ramaswamy, ya ha dicho que la administración entrante examinará miles de millones de dólares en “transacciones de última hora”, incluida la oferta de préstamo a Rivian.
El Departamento de Energía dijo en una declaración separada el viernes que había comprometido más de US$170.000 millones para subvenciones y préstamos a través de fondos disponibles en la Ley de Reducción de la Inflación y una ley de infraestructura bipartidista separada que representa el 82% del total de fondos de subvenciones disponibles a través de esas leyes.
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