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Tras ser acusada de violar una ley de importación y exportación, Suu Kyi podría enfrentarse a tres años de prisión si es condenada
Las autoridades de Myanmar presentaron cargos penales contra la exlíder Aung San Suu Kyi por poseer walkie-talkies importados ilegalmente pocos días después de que el ejército derrocara a su gobierno en un golpe de Estado.
Suu Kyi fue acusada de violar una ley de importación y exportación y enfrenta hasta tres años de prisión si es declarada culpable. El informe policial del incidente indicó que se encontró equipo de telecomunicaciones no autorizado en su casa en Naypyitaw, la capital.
El ex presidente Win Myint fue acusado por separado de violar la ley de gestión de desastres naturales durante un mitin de campaña electoral que, según la policía, violó las restricciones de covid-19 y enfrenta la misma sanción, señala el informe. Kyi Toe, miembro del comité central de información del partido Liga Nacional para la Democracia de Suu Kyi, confirmó el informe.
Suu Kyi ha pedido a sus seguidores que se resistan a los generales de Myanmar, que tomaron el poder el lunes después de afirmar sin presentar pruebas que su aplastante victoria en las elecciones de noviembre estuvo teñida de fraude. El ejército se ha comprometido a celebrar elecciones después de un estado de emergencia de un año.
Los legisladores de su partido emitieron un comunicado el miércoles exigiendo la liberación inmediata de Suu Kyi y el expresidente, el reconocimiento de los resultados de las elecciones de 2020 y la eliminación de todas las barreras para la celebración de una nueva sesión parlamentaria.
Myanmar ha comenzado a ver surgir algunas protestas, y los médicos han prometido cerrar hospitales en todo el país. Un "Movimiento de Desobediencia Civil" iniciado por activistas a favor de la democracia, incluidos profesionales médicos, anunció el miércoles que más de 70 hospitales y departamentos médicos dejarían de funcionar en protesta por lo que llamó un gobierno "ilegítimo". En el pasado, las protestas han sido reprimidas violentamente bajo el régimen militar.
Otra campaña iniciada por los legisladores vio a residentes en la capital comercial de Myanmar, Yangon, golpear ollas y tocar bocinas de autos el martes por la noche para mostrar su oposición al golpe. Están planeando eventos similares a diario y quieren expandir la campaña a otras grandes ciudades como Naypyidaw y Mandalay.
El ejército ha dado un golpe de estado "despiadadamente" y está "poniendo sus propios intereses por encima de nuestra población vulnerable que ha estado enfrentando dificultades médicas, económicas y sociales durante esta pandemia mundial", se lee en un comunicado publicado en la página de Facebook del Movimiento de Desobediencia Civil, que ha ganado más de 160.000 seguidores desde que comenzó el martes.
El grupo se compromete a seguir la dirección de Suu Kyi y su partido Liga Nacional por la Democracia. "No los reconocemos como nuestro gobierno".
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"Países expuestos a mercados de materias primas con elasticidades relativamente bajas, en especial los metales, podrían requerir colchones fiscales y espacio en su política monetaria", sostuvo el informe.
El testigo estrella es el ex abogado de Trump, Michael Cohen, quien personalmente pagó a Stormy Daniels para que guardara silencio
