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En medio de la incertidumbre que generó la valoración de Fabricato, la compañía presentó al mercado, a través de la Superintendencia Financiera, sus resultados correspondientes al acumulado de 2012. En ellos la textilera demostró que sigue atravesando una grave crisis, pues sus pérdidas se incrementaron 1.556% el año pasado y llegaron a $93.373 millones, frente a los $5.636 millones registrados en 2011.
En cuanto a las ventas, la compañía presentó un total de $545.539 millones en el año, lo que supone una disminución de 14,7% respecto al ejercicio anterior y una caída de las unidades de 9,7%
En este sentido, la caída fue más pronunciada en el cuarto trimestre, ya que los datos de este periodo arrojaron unas ventas de $112.342 millones, lo que supone una caída de 28,4% frente al mismo periodo de 2011. Estos mismos números, mostraron una cifra que refleja una disminución en cuanto al número de unidades de 21,0%.
Según explicó Fabricato en su informe de resultados, “las razones que explican la caída de las ventas son, por una parte, la disminución del precio promedio de venta en 9,3% en el trimestre y de 5,6% en el año. Además, por el incremento de 80% en las importaciones legales de confección y de 39% de telas en los dos últimos años; se desconocen las cifras de las importaciones ilegales. Y por último, la compañía lo atribuye a la desaceleración de la demanda en los mercados regionales donde Fabricato participa activamente como México y Ecuador”.
Para Alejandro Reyes, director de investigaciones económicas de Ultrabursátiles, en las malas cifras influyó también la mala prensa que ha tenido y la complicada situación internacional.
“Hay tanta mala prensa e información negativa que se ha generado en torno a la compañía que eso provoca una gran limitación en cuanto a sus negocios. Mucha gente al ver todo lo que ocurrió con Interbolsa, seguramente decidió no tener tratos con la compañía y por supuesto, eso influye de manera muy negativa en el desempeño de sus operaciones”, dijo el experto.
Además, agregó que, “al fijarse también en los datos de crecimiento de las economías a nivel mundial, el hecho de que siga disminuyendo la demanda en muchas de esas economías, provoca que la misma compañía se vea afectada por la gran exposición que Fabricato tiene en países como Estados Unidos”.
Pero el mal desempeño de Fabricato va muy en línea con el mal momento que desde hace un tiempo está viviendo el sector textil en su conjunto.
De acuerdo con Gustavo Tobón, decano de la facultad de economía de la Universidad Javeriana, el textil es un sector que está totalmente rezagado. “Desafortunadamente esta actividad, que fue denominada columna de la economía colombiana, en la actualidad perdió la dinámica y quedó rezagada frente al resto de la industria. Hoy en día, con el gran número de importaciones de estos materiales, además al sumarle los problemas cambiarios, la industria textil se ha quedado atrás. Esto viene por el tema de las importaciones que entran al país de otras economías, que compiten con lo nacional por lo general a precios muy inferiores”.
Por otro lado, Fabricato presentó una utilidad bruta de $27.582 millones y una pérdida operacional de $51.429 millones, como consecuencia del impacto negativo que tiene “el consumo de algodones adquiridos mediante contratos antiguos y las provisiones de cartera, inventarios e inversiones”.
Así mismo, en los resultados de la compañía textil se pudo observar un Ebitda de carácter negativo de $15.173 millones, así como una disminución en los activos y pasivos de 8,6% y 0,1% respectivamente. A su vez, El patrimonio cerró en $782.107 millones presentando una disminución de 11,7%.
Así las cosas, el panorama de la textilera no es positivo y de acuerdo con los expertos, se requieren acciones concretas para que la empresa siga en el mercado.
Descendieron las cuentas de cobro
Según la información de la compañía, las cuentas de cobro a los clientes de Fabricato actualmente se encuentran en un valor de $145.761 millones, una cifra que supone una disminución de 31,1%. De igual manera, los inventarios alcanzaron la cifra de $149.844 millones, con una disminución de 24,2%, mientras que su rotación mejoró, al pasar de 113 a 100 días debido a una mejor coordinación entre la producción y las ventas. Por último, los movimientos del capital de trabajo pasaron de 198 a 167 días, explicado principalmente por la disminución de la cartera e inventarios.
La opinión
Gustavo Tobón
Decano de economía de la Universidad Javeriana
“El sector textil, que antiguamente fue uno de los pilares de la economía en Colombia, actualmente perdió la dinámica de la industria y se quedó totalmente rezagado”.
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