Rusia multa con US$6,7 millones a Google por las aplicaciones preinstaladas

La Corte de Apelación de Moscú ha ratificado la decisión del órgano estatal de competencia denegando el recurso interpuesto por la empresa norteamericana para evitar pagar la multa. Las autoridades rusas consideran que Google "abusó de su posición de dominio obligando a los fabricantes de dispositivos móviles a preinstalar 'Google Play' y otras aplicaciones", por lo que tendrá que abonar una sanción de US$6,7 millones.

La mayoría de los teléfonos con Android comercializados en todo el mundo incluyen de serie lo que se conoce como bloatware, aplicaciones oficiales de Google que ya vienen instaladas y que no podemos desinstalar, bajo la premisa de aportar valor añadido al terminal.

Entre ellas están Google Play, el 'marketplace' del gigante del "puntocom", y Chrome como navegador predeterminado, lo que motivó la queja del buscador ruso Yandex, que ya mueve el 60% de las búsquedas nacionales y está creciendo a un ritmo tal que podría llegar a competir a nivel nacional contra Google muy pronto.

Yandex alegó que la promoción que Google hace de sus propios servicios en Android impide que otras alternativas puedan competir, una queja que el FAS considera probada tras una investigación de un año y que ahora ha sido ratificada por el poder judicial al rechazar el recurso. La directora del Departamento para las Comunicaciones y Tecnologías de la Información del FAS, Elena Zaeva, confía en que esta resolución propicie la creación de "una competencia eficiente en el mercado de aplicaciones para móviles", declaró a efe.

Segunda sanción

No es la primera vez que Google recibe una multa por competencia desleal. La Unión Europea multó el pasado mes de mayo a la empresa de la gran G con US$3.390 millones por considerar que favorecía sus propios resultados en su buscador, el más usado del mercado, frente a los de la competencia.

En la Unión Europea, Google no tiene competidores en el sector, ya que no hay una alternativa de calidad, al contrario que sucede en Rusia, donde Yandex no quiere ver frenado su crecimiento por la posición dominante de la compañía norteamericana en el sector móvil.

La sanción de las autoridades rusas es la segunda que Google recibe por casos relacionados con abuso de posición en el mercado, lo que pone en duda hasta qué punto puede Google incluir sus aplicaciones en los nuevos terminales móviles con Android. Desde la empresa alegan que el sistema Android funciona en base a algunas aplicaciones de Google que, por consiguiente, vienen determinadas de serie, y considera que esto es lo que molesta a Yandex que quiere conseguir una posición privilegiada en el mercado.

Más allá de la cuantía de la multa, dos autoridades reguladoras de competencia distintas ya han declarado como ilegales algunas prácticas de la compañía de Mountain View, que ante el crecimiento de la actividad empresarial del sector puede ver su posición amenazada por nuevas alternativas que logren alcanzar amplias cuotas de mercado.