Petroleras y mineras, las firmas más fieles al negocio de alquiler de helicópteros

Uno de los negocios más desconocidos en el mercado del transporte aéreo colombiano es el de alquiler de helicópteros.

Sin embargo, desde 2009 este segmento se ha multiplicado al punto de que el año pasado los ingresos anuales de 10 de las empresas más grandes del sector representaron casi US$400 millones. Entre sus principales clientes se cuentan las compañías petroleras, las mineras y las empresas de generación de energía eléctrica, y aunque no son muchas, entre las prestadoras de estos servicios se destacan Vertical, Helistar y Helicol.

Entre las empresas que más demandan los servicios de estas aeronaves están Ecopetrol, en primer lugar y quien tiene contrato con Helistar, además de Pacific, ExxonMobil, British Petroleum (BP), Chevron, Cerrejón, Isagen, entre otras.

Con el ‘boom’ de la inversión petrolera en el país, que se dio desde el año 2010 por factores como la recuperación de la seguridad del orden público y la mejora de las condiciones para las empresas extranjeras, los servicios que estas demandan también tuvieron un importante incremento. Por eso, cifras de la Aeronáutica Civil muestran que mientras las empresas de helicópteros en 2009 alcanzaron ingresos de US$114,7 millones, en 2010 pasaron a US$197,2 millones y para 2011 a US$385,9 millones.

“El petróleo, la minería y la energía, son nuestro principal mercado y de eso no se sabe. Nos movemos hacia los Llanos Orientales, en sitios como Yopal, Arauca, Florencia, Mocoa, y hacia el norte en la Costa lo que es Cartagena, Santa Marta. En el Magdalena Medio hay operaciones eventualmente. Se concentra la operación en estos sitios porque no hay vías ni maneras de acceder”, dijo Rodrigo Perdomo Gutiérrez, gerente general de Helicol, la empresa más antigua del sector.

Los problemas del sector
Pero lo que impulsa el sector es también hoy la causa de su freno. El vínculo tan fuerte que ha tenido con las empresas de petróleo y de minería ha hecho que la crisis del sector por cuenta de problemas como licencias ambientales y consultas previas con comunidades, disminuya la demanda de estos servicios.

“Este tipo de servicios tienen aplicaciones y nichos que son muy especializados, en los cuales hay cierta demanda. En la medida en que el helicóptero esté dedicado a estas funciones es rentable, pero fuera de ahí es más bien poco”, aseguró Alberto Maya, analista de aviación comercial.

Además de esto, el orden público, que ha sido una carga durante muchos años, también hace restringido el acceso a determinadas zonas del país e incluso generado pérdidas en la operación.

Por este motivo, las empresas grandes ha empezado a vender sus helicópteros para ajustar su capacidad a la demanda del mercado. En el caso de Helicol, desde 2012 han tenido que salir de cuatro de estas aeronaves, y han empezado a comprar aviones ‘charter’ para llevar el negocio hacia otro tipo de servicios en busca de mantener nivelados sus ingresos.

Falta de infraestructura
Según el abogado especialista en derecho aeronáutico, Jairo Fierro, aunque se han descubierto oportunidades para el crecimiento de este mercado en el país, así como en el de los aviones, hay una deficiencia de infraestructura.

“Hace mucho no tenemos infraestructura desarrollada para aprovechar al máximo la inversión. Por ejemplo, en un eventual desastre como un terremoto, Colombia no cuenta con helipuertos a los que se puedan llevar sobrevivientes, y en esos casos es solo a través de los helicópteros que se puede brindar asistencia. Además están frenandos otros potenciales negocios como la fotografía aérea o el transporte dentro de las ciudades”, señaló Fierro.

Mercado con potencial
A pesar de que en el último año se ha complicado el negocio de helicópteros y el crecimiento ya no es el mismo que en 2010, las empresas están buscando nuevas alternativas y las autoridades han respondido con nuevas medidas.

Todavía faltan cifras claras sobre el verdadero estado del sector, como lo afirma Perdomo, pero en la Aerocivil se ha empezado a avanzar con normas que en parte le apuntan al transporte no regular, como la reciente resolución 2590 en la que estableció normas sobre cómo se deben constituir estas empresas, en pesos máximos y número de pasajeros, entre otras disposiciones similares.

Otros negocios de los no regulares
Los altos costos que conlleva la operación de los helicópteros y la disminución de la demanda por los problemas en el sector de petróleo y minería, ha hecho que las empresas de transporte no regular empiecen a fortalecer otros negocios. Para aprovechar además el crecimiento de riqueza de otras empresas del país, ofrecen ahora servicios de vuelos privados y operación de aviones de empresas. En el caso de Helicol, que es del Synergy Group, entre sus cliente tiene a Nutresa, el Grupo Empresarial Antioqueño, Argos, entre otros.

Las opiniones

Rodrigo Perdomo Gutiérrez
Gerente general de Helicol
“Hay mucha más demanda en los temas de exploración que en los de movimiento de pasajeros en campos consolidados. Lo que uno espera es que mejore el negocio petrolero”.

Alberto Maya
Analista de Aviación Comercial
“Estos servicios tienen nichos que son muy especializados, en los cuales hay cierta demanda. En la medida en que el helicóptero esté dedicado a estas funciones es rentable”.

Jairo Fierro
Abogado especialista en derecho aeronáutico
“En un desastre como un terremoto Colombia no cuenta con helipuertos para llevar sobrevivientes, y en esos casos es a través de helicópteros que se puede brindar asistencia”.