“Nos estamos preparando para llegar Medellín con los restaurantes La Lucha y KO”

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Elemento 4K es la empresa que maneja los restaurantes Osaka, La Lucha Sanguchería y KO en Colombia, que conjuntamente están facturando alrededor de US$20 millones al año. Su CEO y socio fundador de la compañía, Juan David Carrillo, habla de los planes de expansión y advierte que el sector restaurantes requiere mayores incentivos.

¿Cuántas sedes tiene la línea de restaurantes en Bogotá?

La primera apertura fue Osaka, y luego en 2018 abrimos tres sedes de La Lucha Sanguchería Criolla. Después, en 2019, llegamos a tres puntos más. En total esta línea cuenta con seis locales. Mientras esto ocurría, nació la marca KO, una propuesta para representar siete países del sudeste asiático y abrimos dos puntos de venta. Uno en abril de 2019 y otro en 2020. Estamos próximos a abrir en noviembre de este año un restaurante de parrilla asiática. Vamos a traer DonDoh, que es como un hijo de Osaka.

¿A dónde apuntan?

Tenemos propuestas de salir de Bogotá. Queremos que esta experiencia la puedan vivir en otras ciudades de Colombia. Estamos contemplando llegar a Medellín con La Lucha y KO. Si se habla de un local como el que vamos a abrir en noviembre, la inversión es de US$1 millón. Cuando hablamos de La Lucha, que son locales más pequeños, puede ser entre US$250.000 y US$300.000 por punto de venta.

¿Cómo han sido las ventas en 2021 y en el primer semestre?

Si bien fuimos de los sectores más golpeados, a partir de 2021 la respuesta de los consumidores fue muy positiva. Ahora estamos en el mejor mes antes del covid-19. Estamos 30% o 40% por encima. Aproximadamente, vendemos US$20 millones al año.

¿Qué tanto se vieron afectados por la pandemia?

Con la llegada de la pandemia se cerraron todos los restaurantes. Solo una marca mantuvo los domicilios. Por esa razón activamos los canales de domicilio de Osaka y de KO. Hoy día este canal se ha vuelto muy fuerte. Activamos un menú de estos dos restaurantes para que se acercara lo más posible a la experiencia que se podía vivir presencialmente, con el fin de generar la seguridad y la presentación de las entregas. Los arrendamientos fueron sostenidos por los domicilios, aunque fue uno de los temas más duros. Actualmente, La Lucha sigue manteniendo este canal y hoy estamos abriendo cocinas ocultas para poder optimizar la operación y se den los tiempos.

¿Qué impacto han tenido por el tema latente como es la crisis de suministro?

Hemos sufrido con varios productos que son importados. Hemos tenido desabastecimiento y para eso hemos buscado sustitutos o suspender esos productos. Otro hallazgo es que en ocasiones no se acaba, pero sí sube mucho el precio de materias primas importadas.

¿Cómo se ve la demanda?

Al mirar la demanda y comparar este mes con el anterior pre-covid, puedo decir que estamos creciendo al 30% mayor en ventas y en la afluencia de clientes se ve un incremento entre 15% y 20%. Como los clientes no crecen al igual que el ticket, la explicación de eso es que la gente está saliendo a consumir mucho más.

¿Qué innovaciones alistan?

Siempre le estamos ofreciendo al cliente apuestas de nuevas cartas y las que tienen mayor acogida lo volvemos parte del menú habitual. Pensamos en la experiencia desde la bienvenida, la música y la calidad. Estamos lanzando nuevos festivales a partir del lunes en nuestro restaurante KO y en octubre tendremos en Osaka el festival de cócteles.

¿Qué visión tienen sobre la reforma tributaria?

El congreso no puede mirar igual a todas las industrias, después del rezago que sufrimos los restaurantes en la pandemia. El sector gastronómico no ha tenido un tratamiento donde los emprendedores tengan un incentivo tributario para que sigan generando empleos. En lo laboral, el tema de las horas extras planteado por MinTrabajo se trata de un incentivo perverso para reemplazar la mano de obra y ajustar los horarios. Necesitamos una reforma integral y con conocimiento real de la industria.

EL PERFIL

En 2014, Juan David Carrillo era gerente de marketing del Grupo Lvmh (de accesorios de lujo) y tenía que capacitarse en Francia como sus compañeros, pero en ese año la empresa lo envió a hacer capacitación a Argentina para hacerle fuerza a las marcas en ese país. Durante ese viaje, este emprendedor terminó cenando en la franquicia de Osaka que está en Buenos Aires en el barrio Palermo. Así comienza la historia que hoy cumple en Colombia seis años de traer la marca Osaka, y junto con ella tres más.