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Empresas Públicas de Medellín (EPM) agregó un nuevo ingrediente a la puja por la venta de las acciones de Isagen.
La firma paisa anunció el viernes pasado que se asociará con la Companhia Energética de Minas Gerais (Cemig) para quedarse con la electrificadora del Gobierno Nacional.
Juan Esteban Calle, gerente general de EPM notificó esta decisión a la Superintendencia Financiera y detalló que su objetivo es “mantenerse como accionista minoritario de la empresa, en compañía de un socio mayoritario que le genere valor agregado para impulsar sus oportunidades de crecimiento tanto en Colombia como en otros mercados de América Latina”.
Esta decisión “reafirma el atractivo que tiene una empresa como Isagen y que fue mal interpretado por los resultados de la primera etapa de venta al sector solidario”, dijo Alejandra Méndez, analista de renta variable de Serfinco.
La apuesta de EPM implicará que de 12,95% su participación que tiene en la compañía, incrementaría hasta un nivel de 20%.
Sin embargo, esta también es una decisión estratégica de la empresa que se ajusta a la ley: EPM tiene 23,3% del mercado de generación de energía, mientras que Isagen tiene 15,2%. El máximo establecido por el Gobierno es 25%, para evitar la concentración en pocas empresas.
Si EPM llega a adquirir directamente los títulos de Isagen, superaría el margen permitido por la ley. “Y la resolución 60 de 2007 establece que no se puede concentrar más de 25% en una sola empresa”, recordó Luis Ferney Moreno, director del departamento mineroenergético de la Universidad Externado.
El académico también reafirmó que la energética es una compañía con un mercado asegurado y proyectos que garantizan su atractivo para un gran jugador.
Entre sus principales atractivos está la Hiroeléctrica Sogamoso (Hidrosogamoso), que le permitirá a Isagen ampliar su capacidad de generación en el mercado nacional.
“Esta alianza nos permitiría proteger y potenciar nuestra inversión en Isagen, contribuiría a que el control de la empresa quedara en manos de una reconocida y reputada compañía global”, dijo Calle.
El anuncio de la empresa le podría dar un empujón a las acciones de la energética durante esta semana, gracias al mensaje que envía al mercado bursátil. “Esto será en el corto plazo. Pero en el mediano y largo plazo, esperamos que haya un mayor efecto cuando se haga la subasta”, agregó Méndez.
De acuerdo con el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, está previsto que la puja se realice el 8 de mayo y no habrá una tercera etapa, con los dos mejores proponentes, como se contemplaba en un principio.
¿Quiénes van por la puja?
La pelea que la Empresa de Energía de Bogotá (EEB) tendrá que dar no será fácil. La compañía tendrá que enfrentar a la mayor organización integrada en el sector eléctrico brasileño, líder en distribución de energía, que cuenta con unos 12 millones de clientes y el sistema de distribución más largo de Latinoamérica.
También es la tercera en los mercados de transmisión y generación, con una capacidad superior a los 7.000 megavatios (MW).
A esta pelea por 57,6% de las acciones se sumarían otras dos empresas internacionales que estarían interesadas en la puja: una de Estados Unidos y otra de Francia.
“Entre la primera etapa y esta segunda, hay una diferencia en el atractivo que el sector solidario y una gran empresa energética pueden encontrar en Isagen. Estas empresas van a ver la capacidad de generación de la empresa a largo plazo”, agregó Méndez.
El Gobierno espera recaudar, al menos, $5 billones que serán clave para las Concesiones de Cuarta Generación (4G). Así que la decisión de la EPM también levanta el ánimo para la propuesta económica.
La opinión
Juan Esteban Calle
Presidente de EPM
“Esta alianza contribuiría a que el control de la empresa quedara en manos de una reconocida y reputada compañía global”.
Juan Ricardo Ortega, presidente del Grupo de Energía de Bogotá, dijo no hay garantía para proporcionar energía eléctrica en Bogotá
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