"Satena es clave para la conectividad de los territorios y regiones más apartados"

Luego del préstamo por US$370 millones del Gobierno a Avianca, tanto dirigentes de otras aerolíneas como la opinión pública han pedido trato igualitario para toda la industria. Viva Air, Easyfly y Satena también están a la espera de un préstamo, pero según los datos financieros reportados por esta última empresa, la situación parece no dar más espera.

Según un documento del Comité de Administración del Fome, la aerolínea estatal hizo una petición para un crédito por US$9 millones en mayo, que no ha tenido respuesta. Además, según el reporte financiero a 30 de junio, la empresa tiene un patrimonio negativo de $82.954 millones, casi el doble de lo registrado en el mismo periodo de 2019, cuando el negativo estaba en $43.498 millones. Además, tuvo pérdidas por $34.619 millones, mientras que a junio de 2019, la cifra en rojo llegaba a $2.664 millones.

Con esto, la situación financiera de la empresa que vuela regiones apartadas se ve apremiante, y más si se tiene en cuenta que había pedido ayuda antes de la crisis del covid-19. En diciembre del año pasado, el Ministerio de Hacienda negó una solicitud de capitalización por $92.000 millones, realizada por el general Pedro Ignacio Lozano Quinche, expresidente de Satena.

En la misiva de respuesta, la cartera explicó que para la vigencia fiscal 2020, “no se incluyó partida presupuestal alguna para cubrir este gasto e igualmente, en las apropiaciones distribuibles del Ministerio de Hacienda de la vigencia fiscal 2020 no se encuentran provistos recursos para atender este requerimiento”. La solicitud se hizo en el marco la ley 1924 de 2018 por la cual se autorizó a la Nación capitalizar a Satena.

Esta situación requerirá un gran apoyo para la empresa, ya que no es la primera vez que la aerolínea ha hecho una petición así. En 2018, en el gobierno de Juan Manuel Santos, la compañía había sido capitalizada con $100.000 millones.

El Brigadier General Luis Carlos Córdoba Avendaño, presidente de Satena, fue cauto, destacó lo hecho por el Gobierno, pero dijo que están expectantes por ayuda, que por ser parte del Estado, el caso es diferente a las otras aerolíneas, y agregó que “el Gobierno, con sus análisis y estudios sabrá en qué momento apoya a las empresas, entre esas Satena”.

Además, con respecto a la solicitud de préstamos hecha en mayo, expresó que, debido a los cinco meses de cese de actividades, ahora necesitarían más, y resaltó que “Satena es clave para la conexión de las zonas apartadas. Brindamos un servicio social y cobramos tarifas muy bajas. En algún punto el Gobierno da una subvención, que se da para cubrir el déficit que significa llevar ese apoyo a las regiones. El esfuerzo del Gobierno es grande y es nuestro aliado”.

A esta expectativa de recursos se suman el resto de las empresas que operan en el país. Declan Ryan, presidente ejecutivo de Viva Air Group, criticó al Gobierno por mostrar un trato especial hacia Avianca y expresó que, si el trago fuera igualitario, a su aerolínea “le tocarían US$100 millones”. Del otro lado, Alfonso Ávila, presidente de Easyfly, celebró el apoyo a Avianca, pero recalcó que “lo importante es que se acoja también a todas las aerolíneas”.

La aerolínea reinició operaciones con cuatro rutas en septiembre
Luego de cese de actividades por cinco meses, el pasado 1 de septiembre comenzó la reactivación del sector aéreo en el país. En esta primera fase, Satena inició operaciones con cuatro rutas. Bogotá - Medellín; San Andrés - Providencia; Barranquilla - Medellín; Cali - Medellín. Satena contaba con 35 destinos dentro del territorio nacional, de los cuales 27 eran destinos sociales y cinco eran destinos comerciales, conectando estos destinos entre sí a través de 92 rutas, de las cuales 76 son de tipo social y 16 son de tipo comercial.