La Pola regresó al Banco de la República como moneda conmemorativa de $10.000

El año pasado fue difícil para el peso colombiano, la devaluación cerró al 31 de diciembre en 20,8%, pero eso no impide que la cara histórica y cultural del Banco de la República, suspenda sus planes. Por eso, algo que se tenía programado desde 2019, el lanzamiento de una moneda conmemorativa de $10.000, finalmente se materializó.

Desde ayer, Policarpa Salavarrieta volvió a la familia del Banco de la República, el icono de la historia colombiana que ya venía de ser la protagonista en el billete de $10.000, ahora lo está en la moneda del mismo valor.

Es una pieza para coleccionistas, solo 20.000 unidades disponibles, detrás de ella está el retrato de 1855 del pintor José María Espinosa. En ese entonces, conocida como La Pola, quedó plasmada la heroína más popular de la Independencia de Colombia.

Salavarrieta quien nació hacia 1795 y fue fusilada en Bogotá el 14 de noviembre de 1817 por conspirar y espiar en favor de los patriotas de los llanos de Casanare, en plena época de la reconquista española, ahora tiene un homenaje en esta edición especial con el grabado “200 años dl sacrificio de la heroína”.

¿Cómo conseguirla?
Ayer empezó su distribución en las ventanillas de tesorería del Banco de la República en el centro de Bogotá, y también hay otros lotes en las sucursales de Barranquilla, Cali, Medellín y Bucaramanga; mientras que en las agencias culturales de Honda y Manizales, llegaron otras unidades.

La moneda conmemorativa, que tiene un valor nominal de $10.000, es de curso legal y podrá ser utilizada para realizar cualquier tipo de transacción monetaria por el equivalente a su valor facial. Esta unidad es de color plateado (aleación de cobre y níquel), tiene un diámetro de 35 mm, y un peso de 21,75 gramos. La moneda se entrega con un plegable que contiene información acerca de sus características.

La Pola entonces tiene esta nueva colección, cuya unidad cuesta el mismo valor que representa $10.000, pero por $19.000, también el Emisor la entrega en un estuche especial para su conservación en el tiempo.
Así se suma otra edición especia a la familia de monedas conmemorativas en las que también estuvieron la madre Laura Montoya o Mariano Ospina Pérez.