Enredo en los fertilizantes importados de Rusia

Un balance de la entidad revela que apenas 6.500 toneladas quedaron en manos de diferentes subsectores beneficiando alrededor de 5.000 agricultores por medio de cuatro federaciones, 17 cooperativas, dos corporaciones y 24 distribuidores minoristas en 16 departamentos. Aún quedan 3.500 toneladas en bodega.

El ministro Aurelio Iragorri explicó que no se trata de una demora de la entidad en vender el fertilizante, sino de disposición de todos los eslabones de la cadena para reducir costos y beneficiar, especialmente, a los pequeños productores, con ahorros entre 15% y 35%. “El objetivo es entrar al mercado de agroinsumos para impactar en los precios finales, no salir rápidamente del stock”, dijo.

Otras 10.000 toneladas pasaron a hacer parte de un convenio que logró el Gobierno con el Comité Nacional de la Federación Nacional de Cafeteros que busca transferir a los pequeños productores del grano este insumo y así ayudarlos a mitigar los efectos del Fenómeno de El Niño. Aunque Iragorri explicó que se trata de una venta entre la Empresa Colombiana de Productos Veterinarios, Vecol y el gremio para atender desde la otra semana el plan de abono en Nariño, Putumayo, Cauca y Huila, el vicepresidente del Comité de Cafeteros de Huila, Álvaro Espitia, indicó que hace parte de una ayuda o subsidio que distribuirá el servicio de extensión en algunas fincas.

El buque Albatross, proveniente del puerto de Mursmank (Rusia) en el mar de Barents, llegó a Colombia el pasado 18 de junio cargado de 20.000 toneladas de este insumo fundamental para las labores agrícolas, lo que representa 1,7% del consumo nacional del mismo. El precio por tonelada de este material importado es de $1,2 millones y se entrega en bultos de 50 kilos con una vida útil de tres años. De acuerdo con un balance de Vecol, aún queda un pequeño remanente que se explica en el hecho de que el clima reduce la venta de estos productos. 

“El fertilizante sin agua no tiene efecto”, explicó Reynaldo Ríos, gerente de Planeación, al tiempo que dijo que con las lluvias de estos últimos días se ha reactivado el comercio, impulsado por estrategias como el un descuento de 3% en compras de contado y las facilidades de pago. La preocupación ahora es que cuando se agote el material disponible el mercado especule con los precios jalándolos hacia arriba, cuando lo que se busca es convencer a la industria que sí es posible tener mejores precios.

Papicultores, los que más hicieron uso del insumo 
El gerente comercial de Fedepapa, Juan Carlos Fuentes, explicó que a la fecha han distribuido 1.700 toneladas de fertilizante de las 2.000 que se comprometieron en adquirir: “estamos cerca de la meta”. De hecho, aunque tienen aún 80 toneladas en bodega, ya solicitaron una entrega de 105 toneladas más para surtir sus 13 almacenes. Esto los convierte en el único gremio que se comprometió y cumplió, además de lograr colocar un bulto a $68.500 cuando se vende a $78.000.

La opinión

Aurelio Iragorri
Ministro de Agricultura
“Queremos demostrarle a la industria que sí es posible lograr mejores precios entre 15% y 35% por debajo. Es por el bolsillo del agricultor”.