El Foro Económico Mundial: punto de partida del nuevo modelo para Colombia

 La sede escogida para esta edición es Medellín - seis años después de haberse realizado en Cartagena de Indias -, ciudad reconocida internacionalmente por su capacidad de transformación positiva, su innovación, su dinamismo.

Que Colombia haya sido elegida como sede del Foro es un claro y merecido reconocimiento al desempeño que el país viene mostrando en términos económicos, sociales y empresariales, en medio de un convulsionado contexto latinoamericano, al tiempo que un voto de confianza en el futuro de una nación en paz. Y es que este Foro no es una reunión entre vecinos latinoamericanos, sino probablemente el más trascendental escenario de reflexión entre Latinoamérica y el resto del planeta. Adicionalmente, es bueno recordar que lo discutido en estas reuniones no se queda solamente en el análisis y las buenas intenciones, sino que se cuenta con la presencia real de inversionistas que tienen los ojos puestos en Colombia para iniciar nuevos proyectos o expandir los negocios ya existentes.

La agenda de este importante encuentro incluye una amplia gama de aspectos trascendentales para Latinoamérica, que serán debatidos por unos 500 líderes de los sectores empresarial, gubernamental y académico, así como directivos de ONGs, provenientes de diversos lugares de la región y del mundo, dentro de los que se destacan el análisis de la situación actual y las perspectivas de la industria, la agricultura, los acuerdos comerciales, el mercado de capitales, la salud, la energía, la lucha contra la corrupción, el crecimiento inclusivo, la competitividad, el desarrollo urbano, la tecnología, la educación, y de manera muy destacada para Colombia, la seguridad y la paz.

Estas temáticas resultan de particular relevancia frente al reciente planteamiento de Mauricio Cárdenas, ministro de Hacienda, sobre un nuevo modelo económico para Colombia que sentará las bases del escenario en el cual se desenvolverá el país en los siguientes 10 años. En este nuevo modelo, se busca que Colombia pase de ser una economía altamente dependiente de los precios internacionales del petróleo y los minerales, a una en que la agroindustria, los servicios, el turismo y la generación de valor agregado en las diferentes áreas de la industria sean los generadores de empleo y crecimiento, para que sea posible diversificar las fuentes de ingresos para el país, pero sobre todo para insertarnos realmente en la dinámica de la economía mundial propia del Siglo XXI. Y como para poner en marcha esta nueva economía los empresarios necesitan dinero, se anunció que en el Foro de Medellín se hará la presentación en sociedad de la “Corporación Interamericana de Inversiones”, entidad perteneciente al Grupo BID, que se constituirá en la única institución financiera multilateral encargada del financiamiento requerido por pequeñas y medianas empresas en América Latina y el Caribe.

Adicionalmente a los temas mencionados de producción, inversión y financiación, es necesario que en este Foro se debata sobre la necesidad imperiosa de incorporar asuntos como la institucionalidad, la generación de un ambiente adecuado para el desarrollo empresarial, la productividad, la competitividad y la innovación y. Pero si de verdad queremos hablar de una “nueva economía”, ella no puede tener otra base diferente que la del bienestar, la justicia, la equidad, la sostenibilidad ambiental y, por supuesto, la paz.

El nuevo modelo económico sólo será viable si logra integrar la preocupación por la diversificación de la oferta exportable con la necesidad de bienestar social, la lucha contra la pobreza y el hambre, el respeto por la vida y la dignidad humana, y el cuidado de los recursos naturales. Lograr esta nueva economía no es una tarea exclusiva del ministro Cárdenas, ni del Gobierno, sino que es una responsabilidad compartida por todos los sectores de la sociedad, particularmente por personas como los líderes reunidos en Medellín para el Foro Económico Mundial sobre América Latina, a quienes invito a ejercer un liderazgo trascendente, con verdadera preocupación por el bienestar humano, poniendo en práctica las famosas palabras que diera en 1961 el presidente John F. Kennedy en su discurso inaugural: “no pregunten qué puede hacer su país por ustedes, pregunten qué pueden hacer ustedes por su país”. Sea este Foro el punto de partida del nuevo modelo propuesto por el Ministro de Hacienda y, ojalá, el inicio de un nuevo capítulo más próspero, más justo, en la historia económica de Colombia

José Manuel Restrepo
Rector Universidad del Rosario