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La agencia destacó los indicadores financieros.
En línea con lo ocurrido con la deuda colombiana la semana pasada, Moody’s modificó la perspectiva de negativa a estable tanto de Bogotá como de Medellín. Entre tanto, afirmó la calificación de ambas ciudades en Baa2.
De acuerdo con el reporte de la calificadora, este cambio refleja el desempeño operativo relativamente fuerte y los indicadores financieros sanos de las dos ciudades. Adicionalmente, Moody’s indicó que ambos han mantenido históricamente fuertes prácticas de administración y gobierno.
“Dada la expectativa de Moody’s de una mejora en el crecimiento del PIB de Colombia, el PIB local se recuperará y conducirá a un mayor crecimiento de los ingresos propios que permitirá que ambas ciudades financien internamente una parte de sus planes de infraestructura. En 2018, los ingresos propios representaron 58% de los ingresos totales de Bogotá y 39,2% de los de Medellín, porciones relativamente altas en comparación con los pares de la región”, indicó el reporte de la calificadora.
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