Buscar soluciones bilaterales, el único camino que le queda a Colombia en crisis con Venezuela

Las reuniones previstas tampoco han surgido su fruto. La primera de ellas fue la de cancilleres que tuvo lugar en Cartagena la semana pasada y en la que no se llegó a un acuerdo; y la segunda, la que estaba prevista para el jueves pero como la Organización de Estados Americanos (OEA) no convocó a cancilleres para debatir el tema no se realizará.

Esta decisión llevó a que la canciller María Angela Holguín cuestionara el papel de la Organización, argumentando que si no es capaz de hacer un foro sobre un tema de violación de derechos humanos, un tema que le interesa a toda la región, qué se puede esperar de los foros multilaterales para la toma decisiones que favorezcan a los países.

Para Luis Fernando Ramírez, vicerrector de investigaciones de la Universidad de la Salle, una de las razones que pudo llevar a que la reunión de la OEA no se diera, es que los cancilleres no quisieron o mejor, no quieren involucrarse en una disputa bilateral. Otro de los factores, pero quizá el menos probable para el académico, es que no tienen mayor conocimiento del tema.

“Esto es un tema que sin duda, tiene sus intereses económicos y políticos y lo que se dio con la OEA es un mal precedente para lo que pudiera darse en Unasur. Con la ONU se pudiera tener un mayor eco mundial, pero lo que se debe tener claro es que ningún organismo nos va a solucionar el problema y el Gobierno tendrá que negociar directamente con el de Venezuela para llegar a un acuerdo”.

En este último punto coincide Luis Francisco Cuesta, docente del Politécnico Grancolombiano, al asegurar que Unasur no será una buena alternativa, luego de que su secretario Ernesto Samper, inclinara la balanza hacia Venezuela. “Samper se retractó pero quedó clara su posición. En ese sentido, lo más sensato es que Colombia busque otras alternativas y lo más efectivo en estos momentos es el diálogo directo, no va ser fácil pero sí se puede lograr”.

La canciller Holguín  dijo que lo que se está buscando con estas reuniones es que el continente conozca que Venezuela tomó una decisión de sacar a los colombianos de una manera indigna.

La convocatoria a la consulta de cancilleres en la OEA obtuvo 17 votos, uno menos de los necesarios para alcanzar la mayoría necesaria, mientras que 11 países se abstuvieron, incluyendo a Panamá, que insistió en su ofrecimiento de ser mediador entre las dos naciones.

Para Cuestas, la decisión de Panamá pudo haber estado aliada al problema de paraíso fiscal que tuvo con Colombia. No hacer parte de este conflicto, es para el docente tener prudencia y no tener un nuevo incidente con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos.

Sin embargo, para Óscar Medina, docente del departamento de organización y gerencia de la Eafit, el problema de la no convocatoria tuvo relación con lo diplomático y el funcionamiento de los organismos. El primero, porque considera que fue mal manejado por Colombia y la convocatoria se realizó a última hora, algo que realmente es desacertado. Y el segundo punto, es el mal funcionamiento que ha venido teniendo la OEA y Unasur, pues hacen de todo menos defender la estabilidad y democracia entre los países.

“Ahora se maneja con intereses políticos que son evidentes a simple vista y su esencia y razón de ser, se perdió”.

Ante la duda de la canciller Holguín de ir o no la reunión de Unasur, el docente dijo que ésta podría ser peor. “Si la OEA es manejada por Venezuela, Unasur es peor”. 

Medina agregó que “la situación resulta aún más compleja porque llegar a un acuerdo por vía directa no resultaría tan fácil porque ambos países no tienen un mismo objetivo. Venezuela está utilizando esta situación como distracción a los problemas internos. Así las cosas, el Gobierno de Colombia tendrá que acudir a organismos internacionales y en el peor de los casos, llegar a una rotura de relaciones pero no en un elemento guerrerista”.

“Colombia debe indemnizar a Venezuela” 

Así lo anunció el defensor del pueblo Tarek William Saab, considerando que por ser un tema delicado y sensible para los venezolanos, el gobierno de Colombia debe indemnizar a su país, pues tienen todas las de perder. 

Saab denunció que los medios colombianos mienten sobre las migraciones ilegales. Los medios colombianos no dicen cómo en un barrio invadido en San Antonio del Táchira, surgió otra invasión. 

Asimismo, rechazó que no se haya hecho, desde Colombia, una separación de las personas que fueron deportadas, ya que algunas estaban solicitadas por la justicia e involucradas en actividades delictivas.