La única igualdad que importa es la igualdad de permiso: que nadie necesite autorización para actuar dentro de los límites del respeto mutuo, que cada individuo pueda decidir libremente cómo vivir, qué producir, qué intercambiar
Construir vínculos sólidos exige visión, intención y método. Se parte de una convicción: no se lidera desde la distancia ni desde el control, sino desde la empatía, la escucha activa y la coherencia