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Analistas 16/11/2025

La informalidad laboral se reduce

Ricardo Bonilla
Exministro de Hacienda y Crédito Público
Ricardo-Bonilla

El mercado laboral colombiano, desde que se construye información, ha estado signado por dos magros resultados: i) una tasa de desempleo promedio de largo plazo superior a 10%, y ii) una tasa de informalidad cercana a 60%. De acuerdo con los resultados dados por la Geih, ambos indicadores revelan mejoras representativas, aun cuando siguen lejos de la tendencia internacional, la tasa de desempleo bajó a 8,2%, en septiembre, y la de informalidad a 55%, para el trimestre julio - septiembre.

La tasa de informalidad ha tenido tres tipos de mediciones, siempre ajustadas a metodologías internacionales: i) con la ENH se usó la tipología del T10, con una medición esencialmente urbana, ii) con los ajustes del 2003 se pasó a la tipología del T5, y iii) con la revisión del 2018 se continuó con el T5 y se le agregó la falta de cotización en salud y pensiones. Esta versión es la que presenta el Dane desde enero de 2021.

Desde el siglo pasado se diferencia entre la informalidad empresarial y la laboral, con estrategias diferentes respecto a alternativas de solución. La formalidad empresarial se basa en cumplir, al menos, uno de cuatro requisitos: i) estar registrado en la Cámara de Comercio, ii) tener RUT, iii) llevar contabilidad, y iv) afiliar los trabajadores en la seguridad social, quien no cumpla es informal. La informalidad laboral se asimila al tamaño micro, T10 o T5, de las unidades productivas y el no cotizar en salud y pensiones, lo contrario es formal.

El cuarto requisito de la formalidad empresarial equivale al segundo de la formalidad laboral, estar afiliado y cotizar en la seguridad social. La estrategia de formalización empresarial recae en las Cámaras de Comercio, considerando que estar registrado y renovarlo vuelve formal a una unidad productiva, cualquiera que sea su tamaño y que, por añadidura, llevará contabilidad y se reportará con la seguridad social. Hoy sabemos que hay muchas más unidades productivas con RUT, que registros en Confecámaras y que no todas cubren la seguridad social.

Las tipologías de tamaño, T5 y T10, con que se mide la informalidad laboral riñen con la estrategia de registro en las Cámaras de Comercio, donde 95% son micro establecimientos. La tipología T10, aplicada el siglo pasado, dice que es informal todo trabajador que lo haga en una unidad productiva con menos de 10 trabajadores, lo que significó que fueran considerados informales los asalariados y empleadores en micro establecimientos, los trabajadores por cuenta propia, excepto los profesionales independientes, el servicio doméstico, los jornaleros y trabajadores familiares no remunerados. En consecuencia, entre 59% y 60% de trabajadores urbanos era informal, con la ENH, así la unidad productiva estuviera registrada.

Con el tránsito a la tipología T5, la informalidad bajó a 51%, y pasaron a considerarse formales del sexto trabajador hacia arriba. Nuevamente los micro establecimientos, con menos de 5 trabajadores, son informales laboralmente, aun cuando el establecimiento esté registrado y lleve contabilidad. El efecto fue el de reducir los segmentos de empleadores y asalariados, declarados informales, en la franja de 6 a 10 trabajadores.

La revisión del 2018 visibilizó el verdadero problema de la formalidad empresarial y del trabajo, la respuesta al sistema de seguridad social, que es la gran debilidad de la estrategia de las Cámaras de Comercio, a las cuales, les interesa el registro mercantil, pero no influyen en el seguimiento de los aportes a salud y pensiones.

Ocupados posición ocupacional
Gráfico LR

El ejercicio del Dane, de mantener en paralelo las dos mediciones, mostró que, al incorporar el reporte de estas cotizaciones, la informalidad se incrementó, en 2021, en el total nacional, a 59%, en cabeceras a 52% y en zona rural y centros poblados a 86%. La evolución de la informalidad en este quinquenio, entre 2021 y 2025, con la nueva medición, muestra mejoras sustanciales, al trimestre julio – septiembre de 2025 se redujo, en el total nacional, a 55%, en cabeceras a 48% y en centros poblados y área rural a 83%.

La gráfica 1 muestra la distribución por posición ocupacional, con tres segmentos formales, 7,7 millones de asalariados particulares, 847.000 con el gobierno, y 1,6 millones de profesionales independientes o por cuenta propia, mientras la informalidad se concentra en trabajadores por cuenta propia, no profesionales, con 8,2 millones y tres millones de asalariados particulares, vinculados con micro establecimientos, más jornaleros, servicio domestico y familiares no remunerados.

Porcentaje cotizantes salud y pensión
Gráfico LR

La gráfica 2 revela el efecto de la reducción de la tasa de desempleo y la creación de mayor empleo asalariado en los aportes a la seguridad social. En el quinquenio la afiliación a salud, entre la población que trabaja, creció de 88,6% a 95,9%, un 7,3% de población adicional en el sistema, de los cuales los cotizantes del régimen contributivo crecieron en 10 puntos, pasando de 37% a 47,5%, esto sigue siendo consecuencia de la eliminación del aporte patronal. El resultado más impactante se encuentra en la población que cotiza a pensiones, que se incrementó en 14 puntos, desde 30% hasta 44%. En ambos casos, la cotización sigue por debajo de 50%, de ahí que la informalidad sea de 55%.

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