Crece la contratación laboral

La Gran Encuesta Integrada de Hogares Geih del Dane, después de superar las dificultades generadas por la falta de ejercicio simultaneo con la Encuesta Continua de Hogares ECH, se consolidó y hoy brinda información tanto del mercado laboral como de desigualdad social. Al menos, desde 2010, tiene continuidad en la construcción de indicadores mensuales y trimestrales sobre “Posición ocupacional” de los colombianos.

Con ella se puede hacer seguimiento de: i) la cantidad de puestos de trabajo nuevos, creados a lo largo del tiempo, ii) la relación efectiva en el mercado laboral, de subordinación con contratos de trabajo asalariado, o de independencia bajo la figura de trabajadores por cuenta propia, y iii) los vínculos con la seguridad social, de subordinados, prioritariamente con el régimen contributivo, o de cuenta propia con el régimen subsidiado.

Desde que se llevan estadísticas laborales, con la ENH, los dos segmentos del mercado se hicieron evidentes y en su comportamiento se puede diferenciar tres momentos: i) antes de la Ley 100/93, ii) la entrada en vigor, de dicha Ley, en abril de 1994, y iii) la reforma tributaria del 2012, Ley 1607, que eliminó el aporte patronal a salud y redujo la parafiscalidad.

Durante más de cuarenta años, en la segunda mitad del siglo XX, la tendencia era a contratar laboralmente, cualquiera que fuese la modalidad de contrato, mientras los trabajadores independientes se diferenciaban claramente, minifundistas, transportistas, comerciantes, etc. Para 1994, la distribución, con una población ocupada de 15 millones de personas, era 8 asalariados, 4 independientes y 3 en otras modalidades, como empleadores, servicio doméstico, jornaleros y trabajadores familiares.

Con las reformas de los noventa, la Ley 50/90 y 100/93, aparecieron figuras de tercerización como las Cooperativas de Trabajo Asociado CTA, contratos sindicales, y otras figuras no laborales, que condujeron a sobredimensionar la figura de los independientes, a tal grado que, en 2010, con una población ocupada de 19 millones de personas, solamente 7,2 eran asalariados, los independientes crecieron hasta los 8,4 millones, mientras 3,4 eran empleadores (1 millón) o trabajaban en el servicio doméstico, como jornaleros o familiares no remunerados.

Con la eliminación de los parafiscales de salud, Sena e ICBF, 13,5 puntos de la nómina, se volvió innecesario tercerizar los contratos laborales y retomó fuerza la contratación asalariada. En septiembre de 2010 trabajaban 19 millones de personas, de ellas 7,2 eran trabajadores asalariados, 6,4 al servicio de particulares y 0,8 con el gobierno, quince años después, septiembre del 2025, trabajan 23,9 millones de personas, 4,9 millones adicionales, de los cuales 4,3 millones como asalariados, para completar los 11,6 millones, distribuidos en 10,7 al servicio de particulares y 0,9 con el gobierno.

La figura del independiente o trabajador por cuenta propia se moderó y en los quince años solamente se incrementó en 1,4 millones de personas, pasando de 8,4 millones en 2010 a 9,8 millones en 2025. De los 4,9 millones de nuevos puestos de trabajo, el 88% son asalariados y 28% por cuenta propia, mientras los empleadores se redujeron en 10% y los trabajadores familiares no remunerados en otro 10%.

Por periodo de gobierno (gráfica 1), el mayor volumen de nuevos puestos de trabajo, 1,7 millones le correspondió al primer periodo Santos, entre 2010 y 2014, a un promedio de 425.000 por año, le sigue en volumen al actual periodo Petro, tres años transcurridos entre 2022 y 2025, con 1,5 millones y promedio de 500.000 por año. El gobierno Duque es el tercero, son 886.000 en el cuatrienio y finaliza Santos con su segundo periodo y 746.000 en los cuatro años.

La contratación asalariada se aceleró, desde la entrada en vigor de la Ley 1607, y se ha mantenido hasta ahora (gráfica 2). En el gobierno Petro se han creado 1.538.000 nuevos puestos de trabajo, de ellos 1.253.000 son asalariados particulares, 44.000 en el gobierno, 116.000 por cuenta propia y 145.000 jornaleros. Es el sector privado el que ha dinamizado el mercado laboral y propiciado la reducción de la tasa de desempleo, hasta 8,2% actual.

Finalmente, resaltar dos temas: i) la reducción de la tasa de desempleo, que Santos recibió en 10.9% y entregó en 9.4%, para que Duque la dejara en 10,6% y hoy se tiene en 8,2%, y ii) la reducción de la brecha de género, que Santos recibió con tasa de desempleo del 14,6% mujeres y 8,1% hombres, para una brecha de 6,5, ocho años después entregó con tasa de 12,1% mujeres y 7,8% hombres, reduciendo la brecha a 4,3; Duque aumentó la brecha a 4,5 y las tasas, a 13,3% mujeres y 8,8% hombres; Petro bajo las tasas, a 9,6% mujeres y 7,1% hombres, y la brecha, a 2,5.