El futuro de las megaciudades

El informe “The World’s Cities in 2018” de las Naciones Unidas confirma una irreversible tendencia que hemos venido experimentando en las últimas décadas: se estima que hoy 55,3% de la población global vive en ciudades y se espera que para 2030 esta cifra alcance 60%.

Las ciudades de más de un millón de habitantes han aumentado de 371 a 548 en menos de 20 años. Esto significa que 1.700 millones de personas (23% de la población) vive en alguno de estos asentamientos. Sin embargo, el mundo aún está compuesto de pequeñas y medianas ciudades. Actualmente hay 467 asentamientos entre uno y cinco millones de habitantes y 598 ciudades de 500.000 a un millón. El informe estima que en 2030 una de cada tres personas vivirá en este tipo de ciudades.

Por otro lado, 6,9% de la población (529 millones de personas) vive en megaciudades. De acuerdo con el Departamento para Asuntos Económicos y Sociales de la ONU esta categoría indica asentamientos que en su aglomeración urbana superan los 10 millones de habitantes. Tokio es la megaciudad con mayor población en el mundo (37,5 millones) seguida de Delhi (28,5 millones) y Shanghái (25,5 millones). Se estima que en 2030 Delhi sea la más poblada con 39 millones de habitantes.

Hoy en día existen 33 megaciudades, 27 de ellas ubicadas en el hemisferio sur, principalmente en países en vía de desarrollo. China alberga seis, India cinco, misma cifra que América Latina. Y es que en el Top 10 de las ciudades más pobladas se encuentra Sao Paulo, en cuarta posición con 21,6 millones de habitantes seguida de Ciudad de México con 21,5.

No muy lejos de esta realidad se encuentra Bogotá. Según las estimaciones de la ONU, la aglomeración urbana de la capital pasó de 6.329.000 habitantes en el año 2000 a 10.574.000 en 2018 con una tasa de crecimiento anual del 2,9%, 0,5% por encima del promedio global. Bogotá es hoy una megaciudad.

Si bien estas cifras pueden ser controvertidas con las primeras estimaciones del Censo 2018, que indican que en Bogotá viven 7.412.566 habitantes y, probablemente, otro millón y medio en la aglomeración, no demeritan la magnitud del desafío que tiene la ciudad por delante.

La ONU reconoce en su informe varios retos que deben sortear este tipo de aglomeraciones, siendo el más importante cumplir con la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible. De los 17 objetivos acordados en la asamblea de 2015, lograr que ‘las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles’ con las tasas de crecimiento poblacionales actuales es algo incierto.

Pese a la magnitud de megaciudades como Tokio o Ciudad de México, estas han sido capaces de proveer, por ejemplo, modos de transporte masivos para la gran mayoría de sus habitantes. Bogotá en ese aspecto, a pesar de grandes esfuerzos como la adjudicación de la primera línea del Metro, y la construcción de Transmicable, que ofrece mayor inclusión a los habitantes de barrios marginales, se encuentra rezagada.

Otro aspecto urgente por mejorar es la tasa de homicidios por 100.000 habitantes. En 2018, megaciudades como Delhi o Sao Paulo registraron tasas de un solo dígito (2,9 y 5,5 respectivamente) mientras que Bogotá registró 13.

Será deber de las siguientes administraciones poner al día a la ciudad en estos temas. En infraestructura para el transporte, estructurando y construyendo la red de metros y cables; reduciendo a un dígito el número de homicidios por 100.000 habitantes y proveyendo más y mejores servicios a la ciudadanía en general.

Por su parte, Probogotá trabajará intensamente para contribuir a que nuestra región capital tenga los planes y la visión que nos coloquen en las próximas décadas a la vanguardia internacional.