.
Analistas 25/05/2018

Los indecisos

Los cinco candidatos presidenciales han explicado ampliamente las propuestas económicas, sociales y sus proyectos políticos. Hay muchas diferencias fundamentales entre unos y otros en ciertos detalles. Los votantes según lo que muestran las encuestas están divididos. Hay polarización entre izquierda y derecha. Hay discusión en cómo se debe reactivar la economía y atacar los problemas de seguridad del país.

También hay dos tipos de indecisión en la población de votantes. Una parte duda entre Fajardo, Petro y De la Calle por sus ideales de paz, educación, inversión social y lucha contra la corrupción.

Estos votantes lo que si tienen claro es que no van a votar por Vargas o Duque, ya que identifican al uribismo y al santismo como más de lo mismo. Los votantes de derecha tienen la situación contraria, hay claridad en que no van con Petro ni Fajardo, pero tienen dudas sobre su favorito entre Duque y Vargas. Muchos votarán en primera vuelta sabiendo que su candidato predilecto no llegará a segunda vuelta, donde como muchas veces pasa en el país, se configura un voto por rechazo.

La indecisión no es únicamente por el candidato por el cual se vaya o se debe votar. Hay dudas sobre el tipo de país que todos queremos. Como es la primera vez que nos enfrentamos a temas que no tienen que ver con la paz o la guerrilla, Colombia no está acostumbrada a estos debates nuevos. Hay visiones de largo plazo y otras de corto plazo, ya que hay problemas urgentes.

Esto no quiere decir que nos olvidemos de los problemas importantes. Un corto ejemplo nos lleva a pensar si es estratégico dejar que se continúe con el marchitamiento del sector industrial. Muchos ven nuevas oportunidades en el turismo y en los servicios. Otros dicen que se debe invertir en tecnología y desarrollo de aplicaciones.

Fajardo insiste en educación, que es un tema de largo plazo. Vargas ha venido mostrando que su prioridad es mantener altos niveles de inversión en infraestructura, especialmente vías entre regiones. No hay un plan claro de alguno con respecto al empleo entre jóvenes ni he oído que vayan a presentar programas y planes de apoyo a emprendedores de la población femenina, un sector que requiere urgente impulso.

La inversión extranjera es necesaria y no todos coinciden en los tipos de prioridades sobre la misma. Colombia aprendió a no depender totalmente de los ingresos petroleros, pero tampoco puede menospreciar el impacto de esa industria en el mediano plazo. Las posibilidades dejan abierta una incertidumbre que golpea a algunos sectores a la hora de tomar decisiones financieras.

El capital podrá empezar a fluir cuando se despeje un poco el panorama, al menos si hay claridad sobre el perfil de los que lleguen a la final.
Debemos pensar en los próximos 20 a 50 años del país. ¿Qué tipo de sociedad queremos para las nuevas generaciones? Debemos ser responsables y mirar la experiencia, el discurso, los equipos y los proyectos de cada campaña. No es responsable votar sin siquiera haber leído las propuestas diferentes.

Es responsable entender que cada voto cuenta y que también debemos combatir la abstención para enviar un mensaje democrático y sólido. Las expectativas son altas, especialmente desde el extranjero en donde tienen una visión de nuestra Colombia bien diferente a la que nosotros tenemos internamente.

Podemos salir adelante. Inclusive existe la posibilidad de encontrar ideas en común de varios candidatos. Construir sobre lo fundamental. Cada voto cuenta.

Conozca los beneficios exclusivos para
nuestros suscriptores

ACCEDA YA SUSCRÍBASE YA