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La estadísticas de McDonald’s cuentan la historia de sus impresionantes logros comerciales. La compañía atiende a 58 millones de clientes diariamente en 32.000 restaurantes en 118 países. Emplea a 1,6 millones de personas, y tuvo ventas en 2008 de más de US$70.000 millones. Eso es mucha “salsa secreta”.
Pero, ¿cuál es el secreto de su éxito? En 1955, cuando Ray Kroc fundó McDonald’s Corporation (basada en un restaurante de hamburguesas de los originales propietarios, los hermanos McDonald) visualizó a la compañía como un “banco de tres patas”: la firma, sus proveedores y sus franquiciados. Si una pata fallaba, el banco se caería.
Aunque no entendía la necesidad de diversidad en un principio, poco a poco Kroc notó que, para vender más hamburguesas que los demás, necesitaría hacer que McDonald’s fuera tan diverso como fuera posible. Especialmente debía igualar su fuerza laboral con las comunidades minoritarias donde estarían ubicados algunos de sus restaurantes. Una vez convencido, Kroc puso a
trabajar a su personal educativo y de capacitación para apoyar sus esfuerzos de diversificación. Se aseguró de que todo el personal directivo de McDonald’s apoyara la campaña y entendiera cómo dirigir una fuerza laboral compuesta por gente de diferentes orígenes. La compañía se volvió un modelo de diversidad.
La autora Patricia Sowell Harris es responsable de la diversidad en McDonald’s. Y debe estar haciendo un buen trabajo, dado que la revista Fortune nombró a McDonald’s la compañía número uno en diversidad en dos años consecutivos.
Uno de los consejos que da la autora para que su compañía sea cada vez más diversa es verla como un proceso de logros continuos, no como una meta rígida de un incremento de 15% en ventas o ganancias a fin del año. Una compañía no puede lograr la diversidad a menos que sus gerentes sénior aboguen por ella. Puede utilizar los programas de capacitación y educación para ayudar a los empleados a “abrir sus corazones y sus mentes” en cuanto a la diversidad, y así romper las atrofiantes barreras.
La autora aconseja que sea sensible a las necesidades e intereses especiales de cada grupo de diversidad y establezca la meta de incluir a todos en una cultura corporativa unificada. Esa ha sido la meta en McDonald’s, donde la fuerza laboral, desde los freidores hasta el director ejecutivo, está conformada hoy en día por “62% mujeres, 35% hispanos, 20% afroamericanos, 5% asiáticos y 2% aborígenes de Estados Unidos”.
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