Los cuidados que debe tener con su piel si trabaja expuesto a la luz de las pantallas

Aunque no salga de casa y no se exponga al sol, la luz de la televisión o del smartphone puede generar muchos daños en la piel, como envejecimiento prematuro y manchas. Diariamente, las personas se encuentran expuestas a los rayos de las pantallas y ni siquiera lo perciben. “La luz azul la emiten intensamente las pantallas de los dispositivos electrónicos a los que estamos expuestos gran parte del día”, afirma el dermatólogo Leopoldo de Velasco.

Cuidarse de los rayos de luz azul no es una cuestión únicamente de belleza, o para evitar que la piel se manche. Se ha comprobado que estos rayos de luz ultravioleta pueden traer problemas de salud en la piel como cáncer o hiperpigmentación.

¿Qué es la luz azul?

Los efectos nocivos de la luz no solo provienen del espectro ultravioleta (conocido como rayos UV), sino de la luz azul. El tono frío de los focos LED, por ejemplo, son un caso común de exposición a la radiación, así como todas las pantalla de los dispositivos tecnológicos en el día a día, que pueden atravesar la epidermis, la dermis y, finalmente, llegar a la capa subcutánea y dañar la piel.

“La luz azul daña la retina y reduce la liberación de melatonina, así que interrumpe tu ciclo de sueño”, dijo Michelle Henry, dermatóloga neoyorquina.

Claro que la proximidad es un factor cuando hablamos de los daños. “Recibirás menos luz azul proveniente de tu televisión que de tu computadora porque está más lejos”, argumentó Henry. “Y más luz azul de tu celular que de tu computadora, porque tu celular está muy cerca de tu rostro”.

Recomendaciones

Dermatólogos recomiendan no dejar de usar protector solar; incluso si no sale de casa o se encuentra en la oficina, es indispensable el uso de protector. Usar protector solar, para la mayoría, es un hábito a la hora de salir de casa, pero hay muchas personas que erróneamente suponen que no deben usar protector solar si no se está en contacto con el exterior. El uso de este producto lo asocian a la exposición directa del sol, sin embargo, puede ayudar a controlar la exposición de la piel a la luz de las pantallas. Además, recomiendan aplicarlo dos o tres veces al día.

Añaden que es importante lavarse varias veces la cara al día, para mantenerla fresca, aplicar cremas acordes con el tipo de piel y bloqueador.

Finalmente, es importante ubicar el computador con una pequeña inclinación hacia arriba, para que los rayos no vayan dirigidos directamente a la cara, y trabajar con un monitor de pantalla plana debido a que estos emiten menor grado de rayos gama que los convencionales.