Lo que no se califica no progresa ni evoluciona

En esta edición nuestro periódico entrega la cuarta versión de la Encuesta Semestral Empresarial LR que le pregunta a 400 empresarios de todos los sectores económicos y con negocios en las principales capitales colombianas la calificación de los ministros y de los funcionarios de primer nivel. Las notas o calificaciones dadas por empresarios, rectores y líderes gremiales van en consonancia de las opiniones sobre el rumbo de la economía, y sobre todo, de los aciertos, preocupaciones y lunares dentro del Ejecutivo.

Es un hecho que las mejores calificaciones las obtengan quienes más han mostrado ejecución, comunicación y liderazgo en los sectores comprometidos. Es el caso de Germán Vargas Lleras, quien desde la vicepresidencia está liderando el plan contra cíclico con el que el Gobierno Nacional busca reparar la tendencia a la baja en el crecimiento económico. Si bien la Vicepresidencia no es un ministerio como tal, sí está ejecutando obras en un sector neurálgico para la economía y la dinámica empresarial como es la infraestructura y la vivienda. Y en términos de funcionarios de primer nivel, el superintendente de Industria y Comercio, Pablo Felipe Robledo, se mantiene como el de mejores notas históricas, por encima de sus colegas, por una simple razón: la SIC está colonizando el terreno de protección al consumidor que antes no se le ponía cuidado desde los organismo de control y vigilancia.

Las nubes negras de desempeño se están posando sobre las autoridades económicas que tienen que ver con el sector de comercio internacional y minas y energía. La caída en las exportaciones que han generado un insostenible déficit comercial y la pobre estrategia gubernamental para ayudar a que los empresarios vendan más y aprovechen los mercados globales (con una tasa de cambio benéfica y una docena de tratados de libre comercio) han hecho que sus responsables bajen en las calificaciones. Y siguen anclados en las peores notas del gobierno -que llega a su primer año del segundo mandato, o el quinto de la totalidad- los ministros de Trabajo, Ambiente y Transporte, convirtiéndose en una verdadera asignatura pendiente en términos de ajustes en las políticas públicas de estas carteras. Al ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, los empresarios no lo rajan, pero si bajan su nota, en un acción clara de preocupación por el rumbo económico.

Lo que no se califica, no progresa ni evoluciona, así como lo que no se mide no garantiza crecimientos reales, y en términos de políticas públicas es fundamental estar atentos a las opiniones de los depositarios de cada una de las acciones políticas. El Gobierno Nacional está a tiempo de hacer ajustes en sus funcionarios claves de tal manera que los nuevos, con ideas renovadas puedan garantizar el logro de objetivos.