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El artista ya había vendido su casa anterior en abril por un precio inferior al que pagó por la nueva propiedad en el barrio Bel Air
El cantante canadiense Abel Tesfaye, mejor conocido con su nombre artístico como The Weeknd, ahora es el propietario de una increíble mansión en Los Ángeles, la cual adquirió por la cuantiosa suma de US$70 millones.
La mansión era propiedad del empresario holandés Reinout Oerlemans y su esposa, Danielle Oerlemans, quienes antes de la oferta del cantante no se habían planteado venderla, pues hace seis años la habían comprado por US$21,4 millones, así que la transacción fue tentadora, especialmente cuando un banquero europeo había ofrecido US$60 millones.
El negocio se logró con el trabajo de los agentes inmobiliarios Rayni y Branden Williams de Beverly Hills States quienes representaron a la pareja propietaria y Ángel Salvador, otro agente que fue el vocero del comprador en la negociación; finalmente fueron ellos quienes se anotaron a sus curriculum uno de los negocios de mayor valor en 2021, en cuestión de casas de lujo.
La propiedad fue construida en 2002 en una ubicación privilegiada con vista a los campos de golf del Bel Air Country Club, con los años tuvo una ampliación de 1.207 metros cuadrados, además de que se añadió un área de spa y una piscina cubierta.
En este momento el área es de 3.065 metros cuadrados, en los que se distribuyen nueve habitaciones, una cancha de deportes, un sauna, un baño turco, otra piscina infinita al aire libre, una sala de cine, un gimnasio, una cascada y un estudio de música.
El estilo arquitectónico es mediterráneo pero lleno de características modernas, en el diseño de la oficina se encuentra una de las tendencias del interiorismo: industrial.
En la cocina, el mobiliario de lujo resalta por el paso de la luz que se apodera del amplio espacio, las islas centrales son de mármol y los gabinetes de cobre, en la sala de estar se muestran la personalidad de la vivienda con pintura naranja que contrasta con la chimenea, la cual le otorga un aura bohemio al que ya es un lugar de ensueño.
Antes de que el cantante decidiera habitar esta propiedad, vivía en una casa en Hidden Hills en California, pero se la vendió a la estrella Madonna por un precio muy inferior al de su nueva adquisición; aunque The Weeknd pedía US$25 millones, el trato se cerró en US$18,2 millones.
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Uno de los más destacados en el ranking fue el restaurante bogotano, El Chato, a cargo del chef Álvaro Clavijo, el cual se llevó el puesto número uno
